¿Puedo beber avena después de una cesárea?
Avena con leche
Ingredientes: avena, leche, azúcar.
Preparación: Tomar 1 parte de avena, agregar 3 partes de leche y cocinar por 15 minutos, agregar azúcar y se puede usar como papilla para la cena.
Eficacia: La leche es un tónico ideal. Beber una bebida antes de acostarse puede ayudar a conciliar el sueño. La avena no solo puede calmar los nervios, sino también humedecer los pulmones y aliviar el estreñimiento, previniendo el estreñimiento posparto.
La comida para la madre durante el mes incluye principalmente las siguientes categorías:
El guiso es rico en nutrientes, fácil de digerir y absorber, favorece el apetito y la secreción de leche, y ayuda a la madre. recuperar. La sopa de pollo, la sopa de costillas de cerdo, la sopa de ternera, la sopa de manitas de cerdo y la sopa de codos se comen alternativamente. Entre ellas, las manitas de cerdo guisadas con sopa de soja son un alimento tradicional para la lactancia materna.
Los huevos, las proteínas, los aminoácidos y los minerales tienen un alto contenido y tienen altas tasas de digestión y absorción. Se puede comer en forma de huevos duros, sopa de huevo, sopa de huevo al vapor o sopa de fideos. Tradicionalmente, las mujeres embarazadas deberían comer al menos diez u ocho huevos al día durante el parto. De hecho, dos o tres huevos pueden satisfacer plenamente las necesidades nutricionales. Si se come demasiado, el cuerpo no puede absorberlo. Álbum recomendado: Recetas de nutrición y fitness maternal
La papilla de mijo es rica en vitamina B, fibra dietética y hierro. El mijo se puede cocinar solo o junto con arroz, lo que tiene un efecto muy nutritivo. Pero no confíe exclusivamente en las gachas de mijo, porque los nutrientes contenidos en el mijo no son muy completos.
Los alimentos rojos como el azúcar moreno, los dátiles rojos y los frijoles rojos son ricos en hierro y calcio, que son beneficiosos para aumentar la hemoglobina y ayudar a las mujeres embarazadas a reponer la sangre y disipar el resfriado. Pero cabe señalar que el azúcar moreno es azúcar gruesa con muchas impurezas y debe cocinarse antes de consumirse.
El pescado es rico en nutrientes, favorece la lactancia y tiene un sabor delicioso. Entre ellos, la carpa cruciana y la carpa son las primeras opciones y se pueden cocinar al vapor, estofadas o guisadas en sopa o carne.
El sésamo es rico en proteínas, hierro, calcio, fósforo y otros nutrientes, que nutre el organismo y es muy adecuado para los requerimientos nutricionales de la mujer embarazada.
Las verduras y frutas son ricas en vitamina C y diversos minerales, que ayudan a la digestión y excreción y aumentan el apetito. Puedes comer todo tipo de frutas, pero no demasiadas, porque la función del sistema digestivo de la madre aún no se ha recuperado por completo en este momento. Si la fruta está demasiado fría en invierno, puedes ponerla en un calentador para calentarla un rato, o escaldarla con agua caliente antes de comerla.