¿La compresión de archivos de vídeo afectará al vídeo?
Comprimir un vídeo es hacer que el archivo de vídeo sea más pequeño sacrificando el tamaño, el sonido o la calidad de imagen del propio vídeo.
Si se pierden datos individuales durante la compresión (compresión con pérdida), es mejor ignorarlos. La compresión con pérdida se usa ampliamente en archivos de animación, sonido e imagen, los representantes típicos son mpeg, mp3 y jpg.
Datos ampliados
El vídeo sin comprimir suele ser poco práctico. En los sistemas de vigilancia de imágenes digitales, es necesario procesar una gran cantidad de datos de video, por lo que la compresión, codificación y decodificación de imágenes son muy importantes. Actualmente, existen muchos métodos de compresión utilizados en los sistemas de vigilancia digital. Actualmente, los más utilizados son JPEG (para imágenes individuales), H.261 (P × 64) y MPEG (para vídeo y audio).
Con la compresión con pérdida, el archivo original no se restaura después de la compresión del archivo. El compresor reinterpretará el archivo original. Por lo tanto, esta forma de compresión no debe utilizarse si se requiere la reproducción completa del contenido original (por ejemplo, aplicaciones de software, bases de datos).