Venta de cursos de salud

Hay dos razones, una es la codicia por ganancias insignificantes y la otra es el miedo a la muerte.

01. Miedo a la muerte si eres ávido de ganancias insignificantes. Los mayores creen que las estafas sanitarias no son más que el miedo a la muerte, y estos estafadores se aprovechan de esta mentalidad de los mayores para defraudar. Es bastante común que las personas mayores se aprovechen de sí mismas, especialmente en las zonas rurales. Por no hablar de dar huevos, aunque le des una aguja de bordar, alguien vendrá.

La mentalidad de este grupo de personas es que si no se aprovechan, son tontos, y si no se aprovechan, sienten que han perdido 100 millones. Como todo el mundo sabe, no hay pastel en el mundo y lo que les espera suele ser una estafa.

Además de codiciar pequeñas ganancias, muchas personas también temen a la muerte cuando envejecen. Luego de la llegada de los ancianos, comenzaron a vender sus diversos productos para la salud, como colchones terapéuticos, tabletas de calcio, etc. De hecho, todas estas cosas son falsas, pero las personas mayores creen que son ciertas.

Esto me pasó a mí. Mi tía tiene más de 60 años y hay una tienda en el pueblo que ofrece clases de salud. Mi tía iba allí todos los días. Al principio, ella traía algunos huevos u otras cosas todos los días. Más tarde regresó con un colchón. Dijo que podía tratar la enfermedad, pero no funcionó. Además, cuando se siente un poco incómoda, suele ponerse muy nerviosa.

02. No salgas casualmente durante períodos especiales. Hoy en día, la mayoría de las estafas que engañan a las personas mayores se basan en esta rutina. Utilizan pequeñas ganancias para atraer a las personas mayores y luego comienzan a "matar gente" cuando se familiarizan con ella. Tenemos mucho que reflexionar sobre este asunto.

Ser engañado por un anciano es algo para reflexionar. Otro punto es intentar no salir en un período tan especial. Ya es Año Nuevo, el flujo de gente en varios lugares es relativamente grande y cada vez hay más fiestas y banquetes.

En este sentido, creo que no deberíamos asistir a fiestas y banquetes, y no deberíamos suspender las fiestas ni los banquetes. Quedarse en casa y ser un adicto a la televisión es su mayor contribución a la sociedad.

Al mismo tiempo, cuando seas niño o joven, también debes convencer a tus mayores para que salgan menos. En cuanto a esas estafas, también podemos decírselo, pero es bastante difícil evitar que se dejen engañar.