¿Cuáles son los peligros de fumar?

Fumar no sólo daña la salud humana, sino que también trae efectos adversos a la sociedad. Fumar es muy perjudicial para el organismo porque al fumar el humo entra por la boca, pasa por la garganta, la tráquea y los bronquios y llega a la sangre. Por tanto, es fácil provocar enfermedades de la tos como faringitis, traqueítis y enfisema. Déjame darte una introducción detallada a los peligros de fumar.

1.

Fumar es perjudicial para los pulmones. Porque fumar acortará los cilios de las células epiteliales bronquiales, reducirá la resistencia pulmonar y provocará infecciones fácilmente. Al mismo tiempo, fumar debilita la función de los macrófagos y puede provocar cáncer de pulmón. Las estadísticas muestran que el 90% de las muertes son causadas por fumar. Por tanto, debemos asegurarnos de evitar fumar.

2. Carcinogénesis

Fumar puede inducir cáncer. Debido a que las toxinas producidas por fumar pueden inhibir el aumento de linfocitos T, esto conducirá a una disminución en la actividad de las células NK, la función inmune y la resistencia a las enfermedades de las células cancerosas. Las células cancerosas no se pueden eliminar a tiempo y la acumulación prolongada formará cáncer.

3. Daño cerebral

Fumar es perjudicial para el cerebro. Fumar causa una variedad de encefalopatía, reduciendo el oxígeno y la sangre que circulan en el cerebro, lo que provoca sangrado y bloqueo de los vasos sanguíneos cerebrales, lo que provoca parálisis, deterioro mental y derrames cerebrales. Un derrame cerebral es un espasmo de los vasos sanguíneos del cerebro causado por fumar, lo que hace que la sangre coagule más fácilmente.

4. Enfermedades bucales

Fumar puede provocar enfermedades bucales. El calor generado por el alquitrán y el humo de los cigarrillos puede inflamar las glándulas salivales, dañar las papilas gustativas y reducir en gran medida el sentido del gusto y el olfato. Entonces el cáncer oral es muy fácil de ocurrir.

5. Daño al estómago

Fumar es perjudicial para el estómago. Para los pacientes con úlcera gástrica o úlcera duodenal, la velocidad de curación del sitio de la úlcera se ralentiza e incluso se convierte en una enfermedad crónica. Fumar estimula los nervios, acelera la secreción de saliva y jugo gástrico, sobrecarga el tracto gastrointestinal y hace que los fumadores pierdan el apetito. Además, la nicotina contenida en los cigarrillos puede contraer los vasos sanguíneos de la mucosa gastrointestinal y también provocar pérdida de apetito.