¿Cómo hacer pechuga de pollo frita con patatas fritas?
Ingredientes: pechuga de pollo, una patata, tres pimientos, una pizca de aceite y sal.
Ejercicio:
Cortar las pechugas de pollo y las patatas en dados del mismo tamaño.
Calentar la olla, añadir el doble de aceite habitual y calentar hasta que esté al 80% de temperatura.
Añade las patatas cortadas en cubitos por el borde de la olla y sofríe hasta que las patatas estén ligeramente blandas y los dados cambien de color.
En este momento, espolvoreamos sal sobre las patatas cortadas en dados.
Espolvorea los chiles picados por encima y revuelve brevemente.
Vierte también el pollo cortado en cubitos en la olla
Añade el resto de los pimientos verdes y rojos y sofríe pacientemente hasta que las pechugas de pollo cambien de color y los pimientos se ablanden. Si en este momento te queda un poco pegajoso por falta de aceite, puedes echarle un poco de agua.
Sofríe uniformemente y retira de la sartén.
Consejos:
1. Corta las patatas y las pechugas de pollo en dados del mismo tamaño, que quedarán más bonitos al freírlos.
2. No es necesario lavar las patatas cortadas en dados. Poner un poco más de aceite en el cárter para evitar que se peguen a la sartén.
3. Parte 7: Si te gusta la textura crujiente, puedes añadir un poco de aceite.
El valor nutricional de la pechuga de pollo
El valor nutricional de la pechuga de pollo es de sobra conocido. Cada 100 g de pollo contiene 21,5 g de proteína y sólo 2,5 g de grasa, la mayoría de los cuales son ácidos grasos insaturados cercanos a las necesidades del cuerpo humano. La pechuga de pollo también contiene calcio, fósforo, hierro y rica vitamina E, vitamina B1, vitamina B2 y niacina.
El contenido de proteínas de la pechuga de pollo también es relativamente alto y el cuerpo lo absorbe y utiliza fácilmente. Contiene fosfolípidos que desempeñan un papel importante en el crecimiento y desarrollo humanos y es una de las fuentes importantes de fosfolípidos dietéticos en mi país. La pechuga de pollo tiene los efectos de calentar el cuerpo y reponer el qi, reponer las deficiencias y reponer la esencia, fortalecer el bazo y el estómago, activar la circulación sanguínea y fortalecer los músculos y huesos. Es la única carne de la que no tienes que preocuparte de que la grasa animal la dañe. Si desea limitar las calorías, preocuparse por la obesidad o la diabetes, o desea reducir la carga sobre el hígado, el tracto gastrointestinal y otros órganos internos, y comer menos grasa y carne, ¡la pechuga de pollo es la mejor opción!