Cirugía de fibromas uterinos

Los fibromas uterinos son los tumores benignos más comunes de los órganos reproductores femeninos, con una tasa de incidencia superior al 20%, especialmente en mujeres en edad fértil. Los miomas uterinos se pueden dividir en tres tipos según su ubicación:

1. Miomas submucosos: los tumores crecen hacia la cavidad uterina y sobresalen de la superficie mucosa. Este tipo de fibromas se manifiesta principalmente como un aumento del flujo menstrual y períodos menstruales prolongados, pero el ciclo menstrual suele ser normal. A veces, los fibromas se introducen en la cavidad uterina y provocan dismenorrea. La paciente es infértil porque los fibromas sobresalen de la superficie de la cavidad uterina, impidiendo la implantación del óvulo fecundado (incluso si queda embarazada, es propensa a sufrir un aborto espontáneo en el futuro). Generalmente, los leiomiomas submucosos no son grandes y suelen ser difíciles de detectar durante exámenes ginecológicos de rutina. Por lo tanto, a menudo es necesario utilizar la ecografía B para realizar el diagnóstico. A veces los fibromas son relativamente pequeños. Por ejemplo, cuando los fibromas submucosos de la Sra. Fang eran sólo del tamaño de un maní, el diagnóstico fácilmente podía pasarse por alto incluso con repetidos exámenes de ultrasonido B. La histeroscopia es el método más eficaz para diagnosticar los fibromas submucosos. Mientras se juzga la lesión, la miomectomía también se puede realizar bajo un microscopio. Esta cirugía es sencilla y mínimamente invasiva, y las pacientes pueden quedar embarazadas dentro de los tres meses posteriores a la operación.

2. Miomas intramurales: Los miomas intramurales crecen y se expanden, provocando que la pared uterina se engrose significativamente y la cavidad uterina se agrande y se deforme. Las pacientes tienen un aumento del flujo menstrual y períodos menstruales prolongados, a menos que los fibromas estén degenerados y necróticos, rara vez se presenta dismenorrea. Debido a que los cambios en el ambiente intrauterino no favorecen la implantación y el desarrollo de óvulos fertilizados, las pacientes pueden sufrir infertilidad y abortos espontáneos. Los fibromas intramurales pueden ser grandes o pequeños. El examen ginecológico puede revelar que el útero de la paciente está agrandado o parcialmente abultado, y el diagnóstico puede confirmarse mediante un examen de ultrasonido B.

3. Miomas subserosos: Los miomas crecen hasta la superficie del útero y sobresalen de la superficie serosa. Los pacientes generalmente no presentan molestias evidentes y tienen poco impacto en la fertilidad. El diagnóstico se basa principalmente en el examen ginecológico y la exploración con ecografía B.