Lei Zu presenta la leyenda de Lei Zu.

Leizu, también conocido como Zu, Leizu o Leizu, es una de las figuras legendarias de la sociedad prehistórica de mi país. Ella es la hija de Xiling y la princesa del emperador Xuanyuan.

Lei Zu inventó la sericultura, que se conoce como el comienzo de la sericultura de Lei Zu. En la lejana China, había una vez un hombre. Es una belleza y su estatus histórico y social en la mente de la gente no es menor que el de los Tres Soberanos y los Cinco Emperadores. Ella proviene del misterioso y antiguo país de Xiling e inventó la tecnología para criar gusanos de seda y enrollar seda. Esto puso fin al dilema de los pueblos antiguos que usaban hojas y pieles de animales para cubrir su vergüenza, resolvió el problema de la vestimenta humana y dio un gran paso adelante para la civilización humana.

Esta gran figura es la Reina Leizu, conocida como la "antepasada de la humanidad" y el "Dios del gusano de seda". Hasta el día de hoy, existen varias hermosas leyendas sobre Lei Zu que circulan en Yuan'an, Yichang. Yuan'an también era famosa por su producción de seda en la antigüedad y era conocida como la "ciudad natal de Lei Zu". Lei Zu, cuyo nombre original era Wang Feng, era hija de la antigua familia Xiling y esposa del emperador Xuanyuan Huangdi, antepasado de China.

Legend Record Company

Según los registros históricos, el emperador Xuanyuan vivió en la montaña del emperador Xuanyuan y se casó con la hija de Xiling de Lei Zu. Leizu era la princesa del emperador Xuanyuan. Zhao Kun, un famoso estratega militar de la dinastía Tang, autor de los Clásicos largos y cortos y maestro del gran poeta Li Bai, escribió una inscripción sobre la Tierra Santa de Lei Zu en la dinastía Tang: Lei Zu fue pionero en la método de plantar moreras y criar gusanos de seda, e hilar seda para amonestar al emperador Xuanyuan. El propósito es establecer moreras agrícolas, túnicas ceremoniales, promover matrimonios, honrar rituales, construir palacios, establecer un país, unificar las Llanuras Centrales, tomar el poder y nunca olvidarlo. El respeto es lo primero.

Ha sido inteligente, trabajadora y amable desde pequeña. En aquellos días en que la comida escaseaba, ella solía ir a las montañas a recoger frutas silvestres para que las comieran sus familiares. En aquella época, los antiguos no tenían ropa que ponerse, por lo que utilizaban hojas, cortezas y pelajes de animales salvajes para coser ropa y protegerse del frío. Sin embargo, la ropa hecha de hojas y cortezas tiene un aislamiento térmico deficiente y no es duradera. El pelaje de los animales salvajes es relativamente bueno, pero ni la intensidad de la caza ni el número de animales salvajes pueden satisfacer las necesidades humanas.