Cómo exfoliar

1. Exfolia con sal. Después de lavarte la cara, mantén la cara ligeramente húmeda. Masajea una pequeña cantidad de sal refinada en tu rostro, evitando el área de los ojos. Enjuaga con agua después de 30 segundos. La piel quedará suave y delicada. Una vez por semana.

2. Azúcar en polvo exfoliante, 4 cucharadas de azúcar en polvo, 1/2 cucharada de jugo de limón, 2 cucharadas de aceite de oliva o miel, 5 gotas de aceite esencial (puedes elegir según tu preferencia, revuelve). igualmente). Aplicar sobre el rostro y masajear para su absorción. ¡Después de 30 segundos, límpialo!

3. La exfoliación física, es decir, algunos exfoliantes que podemos ver en el mercado, equivale a eliminar la piel muerta. También existen algunos productos de limpieza con fuertes capacidades de limpieza profunda.

4. La exfoliación química, principalmente diversos ácidos, incluidos los ácidos acuosos y los ácidos de frutas rejuvenecedores, pueden destruir las conexiones entre los queratinocitos, que llamamos desmosomas. La exfoliación química actúa sobre los desmosomas, destruye las conexiones entre las células y afloja la estructura protectora de la piel, logrando así el propósito de la exfoliación.