¿Cuáles son los siete síntomas más comunes de los fibromas uterinos?
(1) Cambios menstruales. Es el síntoma más común, caracterizado por un ciclo menstrual más corto, aumento del flujo menstrual, período menstrual prolongado y sangrado vaginal irregular.
(2) Masa abdominal. Distensión abdominal, edema en la parte baja del abdomen, acompañado de sensación de hundimiento.
(3) Aumento de la leucorrea. La leucorrea aumenta y en ocasiones se produce gran cantidad de secreciones purulentas y secreciones tisulares tipo esfacelo, con mal olor.
(4) Dolor. Generalmente, los pacientes no presentan dolor abdominal, pero suelen experimentar distensión abdominal, lumbalgia, etc. Puede ocurrir dolor abdominal agudo cuando el pedículo del fibroma subseroso está torcido y el dolor abdominal es intenso y se acompaña de fiebre.
(5) Síntomas compresivos. Los fibromas crecen hacia adelante o hacia atrás y pueden comprimir la vejiga, la uretra o el recto, provocando micción frecuente, dificultad para orinar, retención urinaria o estreñimiento. Cuando los fibromas crecen hacia ambos lados, forman fibromas de ligamentos anchos. Cuando comprimen los uréteres, pueden causar ureteral o hidronefrosis. Si comprimen los vasos sanguíneos pélvicos y los vasos linfáticos, pueden causar edema de las extremidades inferiores.
(6) Infertilidad. Los fibromas comprimen las trompas de Falopio y las tuercen, o deforman la cavidad uterina, impidiendo que el óvulo fecundado se implante, provocando infertilidad.
(7) Anemia secundaria. Si el paciente tiene menorragia a largo plazo, puede provocar anemia secundaria y síntomas como debilidad general, tez pálida, dificultad para respirar y palpitaciones.
Si los síntomas anteriores aparecen en la vida, debe estar alerta ante la aparición de fibromas uterinos y asegurarse de acudir al hospital para los exámenes pertinentes y el tratamiento temprano.