El nivel de azúcar en la sangre de la niña es demasiado bajo. ¿Qué alimentos pueden ayudarla a recuperarse?
Espinacas y zanahoria Las espinacas tienen fama de ser "la corona de las verduras". Las espinacas son ricas en vitaminas y minerales. Comer espinacas con regularidad no solo puede reponer el hierro y la sangre, sino también regular el azúcar en sangre. Los pacientes con hipoglucemia a menudo pueden comer espinacas. No sólo eso, las espinacas también tienen un buen efecto terapéutico sobre el estreñimiento, la gota y otras enfermedades. Las zanahorias, también conocidas como "pequeño ginseng", no sólo son ricas en nutrientes, sino que también tienen un buen efecto sobre la producción de sangre. Muchas personas sólo saben que comer más zanahorias puede ayudar a proteger la vista, pero no saben que las zanahorias también pueden ayudar a tratar la hipoglucemia. Por tanto, los pacientes con hipoglucemia normalmente pueden comer más zanahorias.
El melón amargo y el rábano seco salado son formas eficaces de aliviar la hipoglucemia. La literatura antigua registra que el melón amargo puede tratar la "sed" (equivalente a la diabetes actual). Según informes clínicos modernos, el extracto de melón amargo tiene un efecto hipoglucemiante significativo y la tasa efectiva de las tabletas de melón amargo en el tratamiento de la diabetes es de 79,3. El melón amargo se puede preparar en sopa o plato frío, o se puede exprimir para hacer jugo o secar para hacer té. El rábano seco es un alimento que encontramos a menudo en nuestra vida diaria. De hecho, el rábano seco es un alimento saludable de alta calidad con un alto contenido de vitamina B y hierro. Salado y refrescante, con un sabor único.
En cuanto a las proteínas, puedes elegir pollo, pescado, ternera, aguacate, frutos secos y aceite de oliva para obtener proteínas saludables. También evite consumir demasiada azúcar. Dado que las proteínas no son resistentes a las altas temperaturas, se recomienda que, cuando dependan de las proteínas para mejorar el azúcar en la sangre, las personas elijan un método que evite las altas temperaturas y los largos tiempos de cocción. Por ejemplo, el pescado debe cocinarse al vapor durante unos 10 minutos para garantizar el máximo valor nutricional.