¿Cuál es la forma más saludable de bañarse todos los días?
Los expertos creen que alternar el masaje en la ducha con agua fría y caliente puede ayudar a favorecer la circulación sanguínea, pero primero debe ser caliente y luego fría. El agua caliente relaja los vasos sanguíneos de la superficie de la piel, relaja los músculos y le ayuda a relajarse. Cuando tu cuerpo esté lo suficientemente caliente, toma una ducha fría. Esto puede contraer los vasos sanguíneos, promover la circulación sanguínea y excitar la mente y el cuerpo.
El masaje en la ducha debe realizarse después del lavado del cuerpo. Primero, aumente la temperatura del agua de manera adecuada y aumente la intensidad del flujo de agua. Utilice el agua de masaje para realizar un masaje de cuerpo completo para relajar músculos y ligamentos, centrándose en las zonas con músculos tensos o ligamentos doloridos. Cuando todo el cuerpo se haya calentado con el masaje con agua caliente, puedes probar el masaje con agua fría. El masaje con agua fría debe realizarse de forma gradual. No sumerjas todo tu cuerpo en agua fría inmediatamente. Debes comenzar con la cara, los pies o las manos y luego, lentamente, llegar al cuerpo. Si le resulta difícil tolerar el agua fría, puede ducharse desde los pies hasta las rodillas y desde las manos hasta los codos. Sube un poquito cada día y poco a poco te irás acostumbrando.