Red de conocimientos sobre prescripción popular - Conocimiento dental - ¿Qué hacer si su hijo hace la tarea demasiado lento? Aquí hay tres formas de lidiar con los niños que hacen la tarea demasiado lento.

¿Qué hacer si su hijo hace la tarea demasiado lento? Aquí hay tres formas de lidiar con los niños que hacen la tarea demasiado lento.

1. Haz planes con él. Es una buena manera de hacer un plan con tu hijo, respetar sus ideas, dejar que él decida el momento y el orden de hacer los deberes, y los padres pueden brindar sugerencias de mejora a tiempo. Por ejemplo, si quiere irse a la cama a las 10:30, eso no funcionará. Debe asegurarse de irse a la cama a las 10:00. Quería tocar el piano después de las nueve, pero no era posible. Tenía que tocarlo antes. Sería demasiado tarde y molestaría a la gente. Quería dejar el ejercicio al final, pero no, estaba demasiado emocionado y no podía dormir. Quería volver a casa y jugar hasta las 6 en punto antes de hacer los deberes, pero no, jugaba demasiado y era difícil concertar tiempo para después. Sólo cuando se logre una comprensión clara de los horarios, los niños estarán dispuestos a seguir el plan. Debido a que el plan se hizo pensando en él, tiene un sentido de propiedad.

2. No te apresures ni interrumpas. Cree un ambiente relajado y cómodo para su hijo en casa, no lo apresure a hacer la tarea y no lo moleste mientras hace la tarea. Déjele desarrollar buenos hábitos de estudio y déjele concentrarse en sus deberes con tranquilidad. A nadie le gusta que lo obliguen a hacer cosas. Empujar puede ser contraproducente y volver a los niños rebeldes. Cree en su capacidad de autogestión y dale espacio para aprender. Si el niño realmente persiste, se le pueden dar pequeñas recompensas tras una etapa. Fomente sus esfuerzos y progreso y déjele disfrutar de los beneficios. Con el tiempo, se van formando buenos hábitos.

3. Utilizar el poder de la escuela. Comuníquese con el maestro de manera oportuna sobre la tarea del niño en casa, deje que el maestro supervise al niño juntos y forme una fuerza conjunta entre el hogar y la escuela para aumentar el énfasis en la gestión del tiempo. Todos tenemos la sensación de que si el profesor enfatiza solo, es más fácil que los niños presten atención. Puede que los niños no escuchen a sus padres, pero les gusta escuchar a sus profesores. Debemos ser buenos en el uso de esta táctica psicológica. Si conoces a un maestro más cariñoso, sería perfecto. Algunos maestros han establecido un grupo especial de tareas y exigen que los niños publiquen sus planes de estudio y su estado de finalización en el grupo de tareas. Cada niño publicará y se otorgarán puntos de bonificación si lo hacen bien. De esta manera, aquellos que no hacen planes o no se desempeñan bien se dejarán llevar por intereses y se esforzarán por aprender como buenos compañeros, formando un buen ambiente de competencia entre ellos para alcanzar a los demás. Sería aún más perfecto si el profesor celebrara una reunión en clase sobre la gestión del tiempo en clase. Deje que los niños comprendan la importancia de la gestión del tiempo y aprendan métodos de gestión del tiempo, como la técnica Pomodoro, para que puedan aprovechar mejor el tiempo.