Cómo extraer la leche
Método 1: Entender la lactancia.
1. Entender que la lactancia es posible. Aunque pueda parecer sorprendente, es cierto que las mujeres que no están embarazadas o nunca lo han estado pueden amamantar. Las mujeres que quieren alimentar a sus bebés adoptados suelen hacerlo. La producción de leche materna humana suele ser provocada por una interacción compleja entre tres hormonas: estrógeno, progesterona y prolactina (durante el embarazo).
Si la producción de estas hormonas pudiera imitarse mediante estimulación física y/o suplementos hormonales, entonces la leche materna podría producirse fuera del embarazo.
La prolactina (una hormona que estimula principalmente la leche materna) es producida por la glándula pituitaria, no por los ovarios. Por lo tanto, incluso las mujeres que han tenido una histerectomía pueden estimular la lactancia. Sin embargo, en mujeres que ya están embarazadas, inducir la lactancia tiene más éxito.
El proceso de inducción de la lactancia puede durar varios meses, por lo que lo mejor es comenzar cuando se esté pensando en adoptar un bebé. La lactancia materna por parte de la madre adoptiva tendrá más éxito si el bebé tiene menos de tres meses.
2. Entiende los pros y los contras. Inducir la leche materna es algo muy difícil y es necesario sopesar cuidadosamente los pros y los contras antes de tomar la decisión final. Profesor: Es obvio que la principal ventaja de la lactancia materna es que es buena para el bebé. La leche materna contiene importantes anticuerpos, proteínas, grasas y vitaminas que ayudan a su bebé a crecer y ganar peso, y a combatir infecciones y enfermedades. Además, la lactancia materna es una excelente manera de crear un vínculo entre madre y bebé. Esto es especialmente importante con los bebés adoptados, ya que lleva tiempo familiarizarse con ellos. Esta es también la forma más natural de alimentar a tu bebé y evita comprar productos en tiendas que contengan reactivos químicos.
Desventajas: La principal desventaja de la inducción de la lactancia es el tiempo y esfuerzo que requiere para tener éxito. Estimular la producción de leche materna requiere una gran dedicación, ya que la entrega y estimulación de la leche materna debe realizarse de 6 a 12 veces al día, incluso por la noche y temprano en la mañana. Este procedimiento puede dejar sus senos doloridos e incómodos. Si está utilizando terapia hormonal, puede experimentar cambios de humor que interrumpan su ciclo menstrual.
3. Prepárate para los cambios que te sucederán. Antes de iniciar el proceso de inducción de la lactancia, es importante saber qué esperar en tu organismo y los posibles efectos secundarios. Los efectos secundarios de la lactancia son más graves si estás tomando hormonas porque estás engañando a tu cuerpo haciéndole creer que estás embarazada. Puede producirse agrandamiento de los senos, hinchazón o dolor del pezón y menstruación irregular.
Es posible que te sientas cansada y hambrienta porque tu cuerpo cree que estás embarazada. Debes aumentar tu ingesta calórica en unas 200 calorías por día, pero intenta elegir alimentos saludables para reducir el aumento de peso.
También puedes experimentar períodos de cambios de humor, depresión e ira. Por eso es tan útil contar con una pareja, un amigo o un familiar que lo apoye durante todo el proceso y le recuerde su objetivo final. Su deseo sexual también se ve afectado por las hormonas.
Método 2: Estimular la secreción de leche materna
1. Existen muchas hormonas diferentes que pueden usarse para simular el embarazo y estimular la producción de leche materna. La hormona más utilizada es la domperidona, que inhibe la producción de dopamina en el cuerpo, aumentando así indirectamente el contenido de prolactina en el cuerpo, que es directamente responsable del desarrollo de los senos y la producción de leche materna.
En ocasiones además de Pandora, se recomienda combinar otras hormonas como estrógenos y progesterona. Estas hormonas se encuentran en altas concentraciones en el cuerpo y te ayudan a imitar el estado natural de tu cuerpo durante el embarazo. Si tiene menos de 35 años, puede utilizar píldoras anticonceptivas orales combinadas de estrógeno y progestina.
Si aún estás a tiempo antes de que llegue tu hijo adoptado, lo recomendable es iniciar un falso embarazo con seis a nueve meses de antelación (aunque existen algunos métodos que pueden ayudar a acelerarlo). Comience a tomar las tres hormonas sugeridas anteriormente y siga la dosis recomendada.
Continúa tomando hormonas durante estos meses hasta unas seis semanas antes de que nazca el bebé. Deberías dejar de tomar progesterona y estrógeno repentinamente para engañar a tu cuerpo y hacerle creer que has dado a luz.
Continúe tomando domperidona y comience la estimulación física de los senos mediante un extractor eléctrico u otra tecnología manual. La leche materna debería comenzar a aparecer a los pocos días o hasta dos semanas. Una vez que la leche materna comienza a aparecer, se debe continuar con domperidona hasta que se proporcione leche materna consistente o hasta que el bebé esté listo para destetar.
Tomar hormonas sin la supervisión médica adecuada puede provocar efectos secundarios graves. Por lo tanto, le recomendamos encarecidamente que contrate a un asesor de lactancia calificado en una clínica u hospital antes de comenzar.
2. Utiliza un sacaleches eléctrico. Si está usando prolactina, también necesitará usar un extractor de leche. Sin embargo, a veces el extractor se puede utilizar solo para producir leche, aunque esto puede llevar un poco de tiempo. La estimulación física del pezón desencadena la liberación de prolactina, que ayuda al desarrollo de la glándula mamaria y estimula la lactancia. También se libera oxitocina, que es una hormona clave en la producción de leche materna.
El mejor dispositivo es un extractor de leche eléctrico de uso hospitalario que pueda operar ambos senos al mismo tiempo. Son caros, pero en comparación con el tiempo que necesitas dedicar, valen la pena. Los sacaleches manuales también funcionan, pero la versión eléctrica simula mejor los movimientos de succión del bebé.
Si optas por utilizar un sacaleches, deberás empezar a utilizarlo dos meses antes de que nazca tu bebé. ¿Necesitas establecer un horario estricto? Una vez cada 3 horas, cada 15 a 20 minutos.
Debes hacer esto al menos una vez por la noche porque los niveles naturales de prolactina de tu cuerpo son más altos entre la 1 y las 5 a. m., así que aprovecha eso.
Antes de comenzar, masajea suavemente tus senos y pezones con las manos. Esto los mantiene erguidos y ayuda con la succión. Inhala por ambos senos al mismo tiempo, manteniendo los pezones en el centro tanto como sea posible.
Active la succión baja y utilice una bomba de alta velocidad, que puede imitar mejor la rápida acción de succión del bebé. Cuando te acostumbres, puedes ir aumentando gradualmente el tamaño a medio o superior hasta que puedas adaptarte y ya no te duelan los pezones.
No entres en pánico si no ves leche materna. Pueden pasar varias semanas antes de ver una disminución. Simplemente mantenga la calma y la concentración, y cumpla con su horario: la leche llegará.
3. Estimular manualmente la producción de leche materna. La lactancia se puede inducir manualmente sin necesidad de utilizar un extractor de leche mediante la estimulación del pezón y el masaje de los senos. Producir leche materna requerirá más tiempo y esfuerzo que los dos primeros métodos, pero es más barato y más natural que usar hormonas y comprar un extractor de leche.
Técnicamente, es necesario utilizar ambas manos para masajear todo el seno, tal como lo haría usted mismo para hacerse un examen de los senos. Luego necesitarás usar los dedos y el pulgar para estimular los pezones y la areola, masajeándolos y girándolos entre los dedos. Intenta comprimir la areola tanto como puedas mientras tiras del pezón, ya que este es el mejor movimiento para simular la acción de succión de tu bebé.
Debes hacerlo al menos 8 veces al día (incluida una por la noche), durante unos 20 minutos cada vez. Si te sientes cómodo, puedes pedirle a tu pareja o amigo cercano que te dé un masaje. Para poder tener leche cuando nazca tu bebé, es necesario iniciar el proceso con al menos dos meses de antelación.
A medida que se acerque la lactancia, deberá inclinarse y apuntar los senos hacia el suelo. Balancee suavemente sus senos para dirigir la leche hacia sus pezones.
Es posible que desees invertir en lubricante para pezones o lápiz labial para prevenir el dolor en los pezones. Pero no importa cuán doloridos estén sus pezones, es importante no darse por vencido. Recuerda lo feliz que serás cuando nazca tu bebé.
4. Dejar que el bebé succione. Si nace tu bebé y aún no produce leche materna, no te preocupes. Permitir que su bebé se prenda a su pezón, incluso si no hay leche materna disponible, acelerará el proceso. Estimule manualmente los senos y simplemente deje que el bebé succione. La acción de succión natural de su bebé es la mejor manera de estimular las hormonas necesarias para la producción de leche. Porque toda la experiencia, desde sentir a su bebé en su pezón hasta el sonido de su succión, es más realista que la succión o la estimulación manual.
De hecho, la producción de leche materna no es sólo un proceso fisiológico, sino también psicológico. La presencia de tu bebé y la necesidad de leche materna permiten que tu cuerpo responda de forma natural.
El único problema de este método es que cuando el bebé intenta mamar, puede frustrarse al descubrir que no hay leche materna. Para solucionar este problema, compre un auxiliar de alimentación.
Se trata de un dispositivo sencillo que fija un extremo del pezón de la madre a una bolsa. De esta forma, el bebé acepta el alimento, los pezones se estimulan y, finalmente, la madre produce leche materna de forma natural.
Aunque nunca hayas experimentado la lactancia materna, el acto de alimentar a tu bebé es una experiencia vinculante importante e irremplazable que te permite conectar con tu bebé a través de una intimidad especial. Si lo piensas bien, la lactancia materna es una gran ventaja.
Si tu bebé aún no ha nacido, aún puedes amamantarlo para inducir la lactancia; solo necesitas que tu pareja lo haga por ti. Esto requiere un entendimiento tácito entre ustedes, pero también es bastante efectivo y puede mantener una relación más profunda entre ustedes. Algunas parejas lo hacen por motivos sexuales, incluso sin hijos. Sin embargo, si le preocupa la leche materna, es muy importante que su pareja aprenda técnicas adecuadas de lactancia y lactancia y cumpla con un horario estricto.
Método 3: Aumentar la cantidad de leche materna.
1. Complementar con fitoterapia. Muchas mujeres usan suplementos a base de hierbas para aumentar naturalmente su producción de leche materna. Las hierbas más populares y eficaces son las semillas de fenogreco y el cardo. En cuanto a la dosis, se recomienda tomar 3 cápsulas de semillas de fenogreco (que contienen 390 mg cada una) y 3 cápsulas de cardo (que contienen 610 mg cada una) tres veces al día con las comidas, y comenzar a tomar estos suplementos cuando empiece a bombear.
También puedes comprar una infusión llamada "leche materna", que contiene hinojo, cilantro, fenogreco, cardo y anís estrellado. Sabe a regaliz y se puede mezclar con azúcar o miel. Beba hasta tres veces al día y alimente después de comer.
Además de aumentar la producción de leche materna, este té también puede ayudar a reducir los síntomas de gases y cólicos en los bebés.
2. Bebe más agua. El agua se utiliza para producir leche, por lo que es importante mantenerse hidratado durante la lactancia. Se recomienda que las madres que amamantan beban al menos de 6 a 8 vasos de agua todos los días para evitar la deshidratación. También puede beber té de hierbas y comer alimentos ricos en agua, como frutas y verduras, para aumentar el contenido de agua.
Puedes fijarte en el color de tu orina para saber si estás deshidratado. La orina será clara o amarilla si está bien hidratado, o de color amarillo oscuro si está deshidratado.
Es una buena idea reducir las bebidas con cafeína, como el café, durante la lactancia porque son diuréticas y pueden provocar una rápida pérdida de líquidos.
3. Come avena. Las madres que amamantan deben comer un poco de avena para aumentar la producción de leche materna. No hay mucha evidencia científica que explique por qué, pero muchas madres que amamantan experimentan un aumento en la producción diaria de leche cuando comen avena por la mañana.
Algunas teorías sugieren que la avena contiene altas concentraciones de hierro, lo que puede ayudar a reducir el colesterol, los cuales son importantes para una producción saludable de leche materna.
Además de estas razones, la avena es un alimento cálido y reconfortante que proporciona una gran cantidad de energía, ambas cosas que las nuevas mamás necesitan.
4.Imagínalo en tu mente. Si su bebé aún no ha nacido, le resultará difícil aumentar su producción de leche, por lo que es posible que deba hacer un mayor esfuerzo mental. Cuando succione o estimule manualmente el pecho, debe concentrarse en lo que está haciendo: alimentar a su bebé. Esto te ayudará a activar los instintos de tu cuerpo y favorecer la producción de leche materna.
Si no puedes imaginar la necesidad de leche materna, existen algunos accesorios que te ayudarán. Tome una foto del bebé que desea adoptar, grabe un video con una madre que amamanta o escuche el sonido del bebé succionando. Incluso una prenda de vestir o una manta de bebé pueden ayudar.
Consejo: busca un tutorial online o en la biblioteca para aprender técnicas de succión.
Cuando trabajas duro para inducir la lactancia, tu estado emocional es el más importante. Simplemente concéntrate en lo que estás haciendo e intenta imaginarte amamantando. Si su mente divaga, a su glándula pituitaria le resultará más difícil producir las hormonas necesarias para la producción de leche.
Únase a un grupo de apoyo a la lactancia materna para obtener apoyo emocional y consejos útiles.
Una vez estimuladas la lactancia, la leche materna irá saliendo gota a gota, y luego aumentará gradualmente durante la toma.
Advertencia: No estimular los senos durante más de 20 minutos seguidos. La prolactina sólo se libera en tu cuerpo durante un máximo de 20 minutos, por lo que cualquier exceso es innecesario y puede causar irritación.
Ten en cuenta que las pastillas anticonceptivas contienen estrógeno, que inhibe la lactancia.