Como todos sabemos, las gachas de mijo son un gran placer para el desayuno o la cena.
El mijo es el rey de los cereales. Contiene una variedad de vitaminas, aminoácidos, grasas y carbohidratos y tiene un alto valor nutricional. Cada 100 g de mijo contienen 9,7 g de proteína y 3,5 g de grasa, nada menos que la del arroz y el trigo. El contenido de caroteno del mijo es de 0,12 mg por 100 g y el contenido de vitamina B1 ocupa el primer lugar entre todos los cereales. El mijo también tiene un alto contenido en azúcar, 72,8 gramos por 100 gramos, y su aporte calórico es muy superior al del arroz.
El mijo contiene el doble de hierro que el arroz. Para las personas mayores con Qi y sangre insuficientes, el mijo no solo puede nutrir el yin y la sangre, sino también hidratar y aliviar el estreñimiento.
El mijo también es rico en selenio, que ayuda a prevenir el cáncer y antienvejecimiento. Por lo tanto, se puede decir que el mijo es el tónico más ideal para las mujeres mayores y frágiles.
Al cocinar gachas de mijo, se forma una capa de aceite, a saber, aceite de arroz y aceite de mijo, que son ricos en vitamina B, que pueden promover la peristalsis intestinal y estimular el apetito. Es muy útil para aliviar síntomas como diarrea, estreñimiento, vómitos, malestar dental y otros síntomas causados por debilidad congénita del bazo y el estómago y una dieta poco razonable. En la antigüedad, el aceite de mijo se llamaba sopa de pollo con ginseng de los pobres, por lo que tiene un alto valor nutricional. Cuando su bebé está enfermo, beber aceite de mijo puede regular fácilmente el tracto gastrointestinal y promover la recuperación.
Cuidado al comer mijo
El mijo es rico en 17 tipos de aminoácidos, 8 de los cuales son esenciales para el cuerpo humano. Lo que falta es la lisina necesaria para el cuerpo humano, por lo que es necesario utilizarla con arroz. Por tanto, si comes mijo durante mucho tiempo, puedes mezclarlo con un poco de arroz para compensar sus carencias nutricionales. Además, el contenido de leucina es demasiado alto. La ingesta excesiva de leucina en la dieta aumentará el contenido de amoníaco en el cuerpo y dañará las funciones hepática y renal. Por lo tanto, el mijo generalmente no es un alimento básico, pero se pueden agregar dátiles rojos, soja, baya de goji, etc. al cocinar.
Es hora de beber gachas de mijo.
La papilla de mijo es más adecuada para beber por la noche. No sólo es fácil de digerir, sino que también mejora la calidad del sueño. El mijo ocupa el primer lugar entre los cereales en cuanto a contenido de triptófano. El triptófano puede mejorar el sueño. Beber gachas de mijo por la noche no solo hace que las personas duerman profunda y rápidamente, sino que también las hace sentir frescas y sonrosadas al día siguiente.