Tengo una sensación de relámpago en mi pecho izquierdo. ¿Qué está pasando?
Si se trata de un dolor obstructivo, puede ser que el componente de la enfermedad coronaria sea relativamente grande. Lo mejor es acudir a un hospital grande para realizar una angiografía y comprobar si hay algún problema con el sistema cardiovascular. No pierdas el tiempo pensando en esto y aquello. No empeore la condición y desperdicie la primera oportunidad de tratamiento. La angiografía sólo cuesta unos pocos miles de dólares. El dolor en el pecho izquierdo se puede dividir en las siguientes situaciones: dolor opresivo, acompañado de dificultad para respirar, o asfixia nocturna. La mayoría de los DELE son problemas cardíacos. El dolor, el hormigueo o el dolor es polineuropatía. Otro tipo de erupción en forma de banda también puede causar dolor por FACA. El dolor, aunque sea un síntoma leve, es lo peor que se puede comprobar. Te sugiero acudir a un departamento de neurocirugía o dolor para un chequeo.
Costillas rotas. Los traumatismos graves y la tos pueden provocar fracturas, pero en algunos casos el diagnóstico puede realizarse sin ninguna inducción. El diagnóstico se puede confirmar mediante TC de tórax y reconstrucción ósea tridimensional de las costillas. Si hay fractura de costilla, buscar otras enfermedades que puedan provocar la fractura, como tumores malignos, metástasis óseas, mieloma múltiple, etc. De hecho tengo síntomas similares a los tuyos. Mis síntomas fueron como un calambre repentino en el lado izquierdo del pecho. El dolor duró más de diez segundos. No te atrevas a moverte cuando te duela. Pueden producirse varias horas de alivio del dolor. Hace cinco o seis años me hice un electrocardiograma con un monitor cardíaco de 24 horas. No pasó nada después de comprobarlo.
Según sus síntomas, puede ser una neurosis cardíaca, pero la neurosis cardíaca requiere exámenes cardiovasculares relevantes, como angio-TC coronaria o angiografía coronaria, ecografía, electrocardiograma ambulatorio, examen de tiroides, etc. , descartar enfermedades orgánicas y confirmar que no hay daño evidente en las arterias coronarias. En este caso, primero se deben descartar la enfermedad coronaria y la angina de pecho, y es mejor acudir a un hospital habitual más grande para un examen. Si el riesgo de lesión de la pared torácica es bajo, se puede observar,