¿Cuáles son las características febriles de la escarlatina en los niños?
La escarlatina es una enfermedad infecciosa respiratoria aguda causada por estreptococos hemolíticos. La escarlatina típica suele tener un inicio agudo, con tres manifestaciones clínicas características: fiebre, angina y erupción congestiva difusa dentro de las 24 horas posteriores a la enfermedad.
La escarlatina se caracteriza principalmente por fiebre alta persistente, con una temperatura corporal que a menudo alcanza entre 39 y 40 °C.
La fiebre se acompaña de síntomas como malestar general, dolor de cabeza y falta de apetito. La causa de la escarlatina es que las toxinas de la erupción y otros productos producidos por bacterias patógenas invaden el torrente sanguíneo a través de los abundantes vasos sanguíneos de la faringe, provocando síntomas de intoxicación sistémica. Las toxinas rojas de la erupción no solo pueden causar síntomas de intoxicación sistémica, como fiebre alta, sino que también causan congestión y erupción de los vasos sanguíneos de la piel. Por lo tanto, el nivel de fiebre y la duración de la fiebre durante el curso de la escarlatina son consistentes con la cantidad y los aumentos y disminuciones de la erupción de la escarlatina. En otras palabras, cuanto más alta es la temperatura corporal, más dura la fiebre y aparecen más erupciones.
Para los niños con síntomas graves de escarlatina, se puede administrar una pequeña dosis de paracetamol o aspirina para enfriarlos y se les deben agregar líquidos. Generalmente, no se utilizan métodos físicos como los baños de etanol para enfriar para evitar dañar la piel.