¿Cómo tratar los macrófagos positivos?
El tumor de células gigantes, también conocido como osteoclastoma, está compuesto principalmente por células gigantes multinucleadas y células estromales redondas o fusiformes más pequeñas. Las células gigantes son muy grandes y contienen muchos núcleos, a veces desde docenas hasta cientos. La morfología, distribución y disposición de las células intersticiales fusiformes o redondas son la base principal para determinar la naturaleza de las células gigantes. Generalmente, este tipo de tumor se divide en tres grados: el grado uno es benigno, el grado dos es potencialmente maligno y el grado tres es maligno. El macrocitoma es un tejido de granulación hemorrágico que no está encapsulado y es propenso a sangrar y necrosis. Debido a los cambios en la hemoglobina, los tumores pueden aparecer de color marrón rojizo o verde; la fibrosis del hematoma hace que los tumores parezcan grises; la necrosis del tejido tumoral puede hacer que los tumores se vuelvan amarillos o formen pseudoquistes, que pueden contener un líquido gelatinoso o marrón. Durante la progresión del tumor, la destrucción y la regeneración ósea se repiten alternativamente, por lo que el hueso cortical se expande hacia afuera y se vuelve más delgado, y finalmente es perforado por el tumor. El principio de tratamiento es principalmente quirúrgico y se deben realizar secciones congeladas durante la operación para determinar la naturaleza de la lesión. Tumor óseo primario de células gigantes: legrado y cauterización basal, o extirpación del tumor del tejido sano. Tumor de células gigantes de grado II o III: bloqueo o resección parcial del hueso de la mandíbula, que puede repararse inmediatamente con injerto óseo según la situación.