Diagnóstico por imagen mediante TC

Al observar y analizar, primero debe comprender las condiciones técnicas de la exploración, ya sea una exploración simple o una exploración mejorada, y luego observar cada cuadro de la imagen de TC. Combinado con la observación de una serie de imágenes de múltiples fotogramas, el tamaño, la forma y la relación anatómica entre los órganos se pueden comprender tridimensionalmente. El desarrollo de lesiones en un buen fondo anatómico es una característica de la TC y también es la base principal para el diagnóstico. Generalmente, se pueden desarrollar lesiones que son lo suficientemente grandes y tienen una diferencia de densidad suficiente con respecto a los tejidos adyacentes. Las lesiones se clasifican en lesiones de alta densidad, baja densidad o igual densidad según que la densidad de la lesión sea mayor, menor o igual a la densidad del órgano en el que se encuentra. Si la densidad es desigual, con algunas altas y otras bajas, se trata de una lesión de densidad mixta. Para encontrar lesiones se debe analizar la ubicación, el tamaño, la forma, el número y los bordes de las lesiones, y también se pueden medir los valores de TC para comprender su densidad. Si se realiza una exploración con contraste, se debe analizar la lesión en busca de cambios en la densidad, es decir, si hay realce. Si la densidad de la lesión no aumenta, no se realza; si la densidad aumenta, se realza. El grado de realce es diferente y la forma también es diferente. Puede ser un realce uniforme o un realce desigual o solo se realza la periferia de la lesión, es decir, un realce en anillo. El grado de mejora se puede comprender midiendo el valor de TC del área mejorada y comparándolo con el valor de TC de la exploración simple. Además, también se debe observar la compresión, desplazamiento, infiltración y destrucción de órganos y tejidos adyacentes.

Al analizar exhaustivamente los cambios en el tamaño y la forma de los órganos, las manifestaciones de las lesiones y la afectación de los órganos adyacentes, es posible juzgar la ubicación, el tamaño, el número, el alcance y la naturaleza patológica de las lesiones. Al igual que otras tecnologías de imágenes, también debe combinarse con datos clínicos y analizarse exhaustivamente con otros diagnósticos de imágenes.

La TC es más sensible y fiable a la hora de detectar lesiones y determinar su localización, tamaño y número, pero también tiene ciertas limitaciones a la hora de diagnosticar propiedades patológicas.