¿Qué es el reflujo ureteral pélvico primario en niños?
El reflujo ureteral pélvico primario en niños es un síndrome causado por diversos motivos, como que la orina fluya desde la vejiga hasta el uréter o incluso la pelvis renal, provocando una infección del tracto urinario superior. El reflujo ureteral pélvico primario en los niños es causado por el reflujo hacia los riñones, lo que causa daño al parénquima renal y eventualmente se convierte en insuficiencia renal crónica. La incidencia de nefropatía por reflujo llega al 43% en adultos y solo al 65,438+00% ~ 24% en niños. El tiempo de aparición depende de la gravedad del reflujo y puede oscilar entre 5 meses y 28 años después del diagnóstico. El reflujo secundario es más común. La pielonefritis acompañada de reflujo intrarenal es propensa a daño renal y el aumento de la presión hidráulica del reflujo urinario puede provocar rotura de los túbulos renales, fibrosis renal y atrofia renal.
Síntomas del reflujo pélvico ureteral primario en niños
Los síntomas del reflujo pélvico ureteral primario en niños se manifiestan principalmente en dos aspectos: hidronefrosis e infección del tracto urinario. El reflujo hace que el tracto urinario superior no pueda vaciarse, lo que provoca en cierta medida la dilatación de la pelvis renal y los uréteres, lo que se refleja en la ecografía. Por lo tanto, toda hidronefrosis identificada por ecografía debe tratarse con CUGM para eliminar el reflujo. Debido a que una proporción significativa de niños tiene reflujo asintomático, el uso de la ecografía para detectar el reflujo en grupos de alto riesgo tiene importancia práctica. Las infecciones del tracto urinario en niños son más inespecíficas e incluyen fiebre, letargo, debilidad, anorexia, náuseas, vómitos y retraso del crecimiento. El reflujo ureteral pélvico primario en niños puede presentarse como cólico renal en lactantes con reflujo aséptico, pero esto es atípico. Los niños mayores pueden reportar dolor en las costillas cuando la vejiga está llena o al orinar. Los niños mayores también pueden experimentar dolor y sensibilidad en la cintura y el abdomen cuando se combinan con pielonefritis aguda. Si es así:
1. El niño tiene micción frecuente, goteo o enuresis a largo plazo.
2. Niño menor de 2 años con infección del tracto urinario.
3. Suspender el urocultivo y continuar siendo positivo.
4. Infección del tracto urinario acompañada de deformidad del tracto urinario.
5. Los familiares de primer grado de la familia tienen reflujo vesicoureteral y nefropatía por reflujo.
6. Hidronefrosis en el feto o la infancia.
Esta situación requiere una exploración por imágenes para confirmar el diagnóstico. Puede tratarse de reflujo ureteral pélvico primario en niños.
¿Cómo tratar el reflujo ureteral pélvico primario en niños?
1. Tratamiento médico
El tratamiento médico del reflujo ureteral pélvico primario en niños incluye establecer un sistema urinario regular y regular, orinar dos veces antes de acostarse y vaciar la orina tanto como sea posible. Como sea posible, es fácil aliviar la presión de la vejiga, beber suficiente agua todos los días, promover una mayor micción, comer más alimentos ricos en fibra y hábitos intestinales regulares, y cambiar a medicamentos preventivos en dosis bajas a largo plazo después de controlar la infección en el caso agudo. escenario.
2. Terapia farmacológica
Durante el tratamiento farmacológico, se debe realizar un seguimiento periódico de los niños enfermos, realizando un examen físico cada tres meses y registrando la altura, el peso y la presión arterial. Las pruebas de laboratorio incluyen rutina de orina, recuentos de hemoglobina y glóbulos blancos, y la función renal debe medirse anualmente. Los exámenes anteriores también deben adaptarse en cualquier momento según el estado del niño enfermo. Para saber si la orina permanece estéril, se debe realizar un urocultivo cada 1 a 3 meses. Si el cultivo es positivo, se debe ajustar el tratamiento en consecuencia. Se puede utilizar ultrasonido.
3. Tratamiento quirúrgico
La pielonefritis con reflujo ureteral pélvico primario severo en niños, agravamiento progresivo o persistencia en la edad adulta y pielonefritis que no puede controlarse con medicamentos, las exacerbaciones repetidas requieren tratamiento quirúrgico. El objetivo principal de la cirugía es extender la longitud del uréter submucoso en la vejiga. La longitud del túnel submucoso es preferiblemente 5 veces el diámetro del uréter. Los uréteres con dilatación evidente deben cortarse antes del reimplante ureterovesical.