Red de conocimientos sobre prescripción popular - Conocimientos de oftalmología - Se ha diagnosticado cáncer de pulmón. ¿El cáncer de pulmón tiene síntomas de resfriado?

Se ha diagnosticado cáncer de pulmón. ¿El cáncer de pulmón tiene síntomas de resfriado?

Síntomas del cáncer de pulmón en estadio I y II:

Tos, hemoptisis, sibilancias, opresión en el pecho, dolor en el pecho, disnea, fiebre, etc.

Tercera etapa:

Dificultad para respirar, dificultad para tragar, ronquera, edema de cara, cuello y miembros superiores, opresión en el pecho y varices, etc.

IV:

Las metástasis óseas pueden causar: dolor de huesos;

Las metástasis cerebrales pueden causar: dolor de cabeza, mareos, entumecimiento unilateral de las extremidades o actividad limitada.

Las metástasis a otros órganos generalmente no presentan síntomas específicos.

Análisis de síntomas relacionados con el cáncer de pulmón:

Tos: Los tumores pueden provocar tos seca irritante o una pequeña cantidad de esputo mucoso en la tráquea. Los tumores causan estenosis bronquial distal y empeoramiento de la tos, que en su mayoría es persistente y tiene un sonido metálico agudo.

Hemoptisis: debido a que el tejido tumoral es rico en vasos sanguíneos, a menudo causa hemoptisis, principalmente sangre en el esputo o esputo con sangre intermitente.

Sibilancias: Alrededor del 2% de los pacientes presentan obstrucción bronquial provocada por tumores, lo que puede provocar sibilancias localizadas.

Opresión en el pecho: El tumor provoca estenosis bronquial y el tumor metastatiza a los ganglios linfáticos hiliares. Los ganglios linfáticos agrandados pueden comprimir el bronquio principal o la carina, o transferirse a la pleura, provocando un derrame pleural masivo, o transferirse al pericardio, provocando derrame pericárdico, o parálisis glandular, obstrucción de la vena cava superior o afectación pulmonar extensa, todo lo cual puede afectar la función de los pulmones, causando opresión en el pecho.

Pérdida de peso y emaciación: uno de los síntomas comunes de los tumores. En etapas posteriores del desarrollo del tumor, la pérdida de apetito debido a las toxinas y el consumo del tumor, así como la infección y el dolor, pueden manifestarse como emaciación o caquexia.

Fiebre: Generalmente los tumores pueden generar fiebre debido a la necrosis. La causa de la fiebre es principalmente neumonía secundaria causada por tumores y el tratamiento con antibióticos no es eficaz.

Dolor en el pecho: Alrededor del 30% de los tumores invaden directamente la pleura, las costillas y la pared torácica, lo que puede provocar diversos grados de dolor en el pecho. Si el tumor se localiza cerca de la pleura producirá un dolor sordo o sordo irregular que empeora al respirar o toser. Hay puntos sensibles cuando se invaden las costillas y la columna, que no están relacionados con la respiración y la tos.

Disnea: El tumor comprime las vías respiratorias y puede provocar disnea inspiratoria.

Difagia: La invasión cancerosa o la compresión del esófago puede provocar disfagia.

Ronquera: Las células cancerosas comprimen o hacen metástasis directamente en los ganglios linfáticos mediastínicos y luego comprimen el nervio laríngeo recurrente, lo que puede provocar ronquera.

Edemas de cara, cuello y miembros superiores, congestión torácica y varices: cuando el cáncer invade el mediastino y comprime la vena cava superior, se bloquea el retorno de la vena cava superior.