Pocas personas utilizan dispensadores de agua actualmente. ¿Por qué?
Pero no lo sabes. Cuando la manguera del dispensador de agua se utiliza durante mucho tiempo, las escamas blancas producidas por la oxidación y corrosión de la manguera pueden causar fácilmente una contaminación secundaria del agua potable. Además, según el monitoreo del departamento nacional de monitoreo de salud ambiental, si el agua del dispensador de agua no se limpia durante los primeros tres meses, contendrá virus y bacterias (incluidos enterovirus, colifagos, salmonella, estafilococos, Vibrio parahaemolyticus, etc.). Además, para evitar que el tanque interior del dispensador de agua se queme cuando falta agua, el recipiente de almacenamiento de agua almacena aproximadamente 100 ml de agua. Debido a que la descarga no circula incluso si se cambia el cañón, las bacterias pueden multiplicarse fácilmente. Si no tienes cuidado, los gusanos rojos y los gusanos rojos se juntarán para jugar.
El consumo prolongado de esta agua puede provocar diarrea, vómitos y una variedad de enfermedades gastrointestinales comunes, que tendrán cierto impacto en la salud humana. Los expertos dijeron que el principio de funcionamiento del dispensador de agua es utilizar presión de aire y, al mismo tiempo, una cantidad igual de aire ingresa al interior del dispensador de agua. Incluso el aire limpio contiene aproximadamente 4.000 colonias de bacterias por metro cuadrado. Debido a la mala circulación del aire interior, se transporta una gran cantidad de polvo y otros contaminantes. Después de que este tipo de aire ingresa al dispensador de agua, continuará acumulándose y multiplicándose con el tiempo, y las bacterias alcanzarán un número alarmante, causando una contaminación secundaria de la calidad del agua y poniendo en peligro la salud humana. Cuando se trata de dispensadores de agua embotellada, debemos mencionar el agua embotellada.
La calidad del agua embotellada en el mercado es preocupante. Se dice que parte del agua del balde es agua mineral natural, pero luego de una investigación se encontró que había basura alrededor de la fuente de agua y parte era agua del grifo. Hay problemas constantes con el agua embotellada y la calidad del agua es difícil de garantizar. Por otro lado, algunos fabricantes de cubos pequeños y medianos no desinfectan cuidadosamente los cubos vacíos reciclados, sino que simplemente los enjuagan con agua del grifo. Las bacterias se multiplican en el barril. Si el balde se usa para contener agua, puede estar contaminado por muy limpio que esté. Algunos cubos que han superado su tiempo de uso se han convertido en un "paraíso" para el crecimiento bacteriano.
Por otro lado, unos "barriles negros" están fabricados a partir de polímeros que se encuentran en residuos industriales. Se trata de un contaminante orgánico que penetra fácilmente en las moléculas de agua y tiene efectos cancerígenos en el cuerpo humano. Las personas que beben el agua del "cubo negro" no lo sentirán inmediatamente, pero al igual que el envenenamiento crónico, el daño aparecerá después de muchos años.