Hay varias razones por las que un gato cojea (cuál puede ser la razón por la que un gato cojea repentinamente)
1. Traumatismo: Los gatos pueden sufrir lesiones en las patas debido a fuerzas externas como caídas, caídas, mordeduras de otros animales, etc., provocando cojera.
2. Problemas óseos: Los gatos pueden sufrir enfermedades óseas como fracturas, luxaciones, osteomielitis, etc., provocando rigidez o debilidad en las patas.
3. Problemas en las articulaciones: Los gatos pueden sufrir artritis, sinovitis y otras enfermedades de las articulaciones, provocando dolores articulares y trastornos del movimiento.
4. Enfermedades musculares: Los gatos pueden sufrir debilidad muscular, distensiones musculares y otras enfermedades musculares, lo que provoca debilidad o rigidez en las patas.
5. Problemas nerviosos: Los gatos pueden sufrir daños en los nervios, neuritis y otros problemas neurológicos, lo que resulta en movimientos limitados o débiles de las patas.
6. Otros problemas: Los gatos pueden sufrir infecciones parasitarias, tumores y otros problemas físicos, provocando cojeras en las patas.