Conceptos básicos para el salto de esquí

1. Caminar: La primera acción al ponerse las tablas de snowboard es caminar. Sus movimientos no se diferencian de los de una caminata normal. Puede que al principio no estés acostumbrado, pero puedes ponerte un esquiador, ir y venir dos veces y luego juntarlos para adaptarte al equilibrio paso a paso.

2. Caída: Si te caes, lo más seguro es aterrizar de costado, es decir, aterrizar sobre la parte exterior de los pies y la parte inferior de la cintura. Al mismo tiempo, levante sus propios bastones de esquí y estire los pies para evitar lesiones innecesarias.

3. Cambio de dirección: con el extremo delantero o trasero del esquiador como centro, divida al esquiador interior en la dirección para cambiar a forma de V y luego acerque al esquiador exterior. Este cambio de dirección sólo funciona en nieve plana, no en pendientes.

4. Embarque: La forma más sencilla es subir en teleférico a la montaña. Sin embargo, las estaciones de esquí en la provincia de Taiwán generalmente no cuentan con buenos remontes. La forma más cómoda en este momento es quitarse del esquiador y subir con él. Si te da pereza, también puedes subir la montaña caminando con los esquiadores. La clave es mantener al esquiador a 90 grados con respecto a la pendiente para evitar que se deslice hacia abajo automáticamente.

5. Deslizamiento en terreno plano: Colócate con los pies paralelos y empuja los dos bastones de esquí hacia atrás con la fuerza de las muñecas para que tu cuerpo y los dos esquiadores se deslicen hacia adelante al mismo tiempo. No coloques el centro de gravedad de tu cuerpo hacia atrás, de lo contrario caerá hacia atrás y te hará caer al agacharte.