¿Cómo tratar la epilepsia en perros?
2. Manejar según la situación real. La principal característica de las crisis epilépticas es su aparición repentina, que puede afectar gravemente a las funciones cardíaca, cerebral y respiratoria de los perros enfermos, e incluso poner en peligro su vida. Por lo tanto, es muy importante utilizar medicamentos antiepilépticos lo antes posible para aliviar los síntomas. Clínicamente, la fenitoína se inyecta según el peso del soldado. La dosis general es de 5 ~ 10 mg/kg y se diluye con un 5% de glucosa para inyección intravenosa o administración oral. El método principal es de 2 a 6 mg/kg, 2 a 3 veces/día. Para tratar el estado epiléptico, se utiliza principalmente diazepam. El método principal es la inyección intravenosa con una dosis de 05 a 10 mg/kg, o la inyección intramuscular de fenobarbital con una dosis de 6 a 12 mg/kg. Si su perro tiene epilepsia psicomotora, manténgase alejado de él hasta que termine la convulsión, dándole tiempo suficiente para recuperar la conciencia de su entorno. Una convulsión de gran mal requiere mucha tranquilidad por su parte, así que abrace y consuele suavemente a su perro hasta que termine. Manténgalos alejados de objetos punzantes y duros para que no se lastimen y trate de acolchar sus cabezas. Durante el ataque se pueden tomar medicamentos antiepilépticos orales o sedantes. Si las crisis epilépticas ocurren con frecuencia, es posible que se necesiten medicamentos a largo plazo para controlar la afección.