¿Cuándo se pone azúcar de roca en el pollo guisado?
De hecho, no es necesario poner azúcar de roca al pollo guisado. Aquí hay dos formas de hacer sopa de pollo sin azúcar agregada.
Primero, sopa de tres pollos frescos
Ingredientes: 500g de pollo autóctono, 10g de jengibre en rodajas, 1 maíz dulce, 1 zanahoria, 8 champiñones, 4g de sal y cebolla de verdeo picada al gusto. .
1000ml de agua
Paso de elaboración 1
Remojar las setas secas. Escaldar los trozos de pollo en agua hirviendo, retirar y lavar.
Preparación Paso 2
Póngalo en la olla, agregue rodajas de jengibre y hongos shiitake, luego vierta agua y encienda el modo sopa durante 1,5-2 horas.
Paso 3 de Preparación
A la mitad de la cocción, agrega los trozos de maíz y las zanahorias y continúa cocinando.
Paso 4 de preparación
Añadimos sal y espolvoreamos con cebolla verde picada.
Tecnología patentada
Elija pollo nativo para que sea más fragante y delicioso que el pollo común.
2. Sopa de Champiñones y Pollo (Versión Muslo de Pollo)
Ingredientes: 10 champiñones secos, 1 muslo de pollo, 2 rodajas de jengibre, 5g de sal, 5g de cebolla verde picada, 5 g de aceite de cocina, 1500 ml de agua.
Paso 1 de elaboración
Remojar las setas secas en agua.
No viertas el agua de remojo de las setas. Úselo para hacer sopa. La sopa quedará muy fragante.
Preparación Paso 2
Calentar la sartén con aceite, verter las piernas de pollo y sofreír el aceite de pollo a fuego lento.
La sopa de pollo guisada de esta forma quedará más fragante.
Preparación Paso 3
Vierte los champiñones remojados, el agua de champiñones, el agua y las rodajas de jengibre en la olla, tapa la olla y cocina a fuego medio durante 40 minutos.
Si te gusta suave y tierno, puedes cocinarlo a fuego lento un rato hasta que el pollo esté cocido a tu gusto. 2. Revise la sopa en cualquier momento durante el proceso de guisado y agregue el agua adecuada.
Paso 4 de Preparación
Espolvorea un puñado de cebolla verde picada y sazona con sal antes de cocinar.
Tecnología patentada
Este plato puede guisar muy bien la grasa de pollo. Si no te gusta la sopa de pollo grasosa, puedes guardarla en el frigorífico durante la noche. El aceite se solidificará en la superficie de la sopa al día siguiente. Quita el aceite con una cuchara, luego calienta la sopa y podrás disfrutar de una refrescante sopa de pollo.