¿Debo ir a un hospital o a una clínica dental para ver a un dentista?
Se recomienda acudir a un hospital grande. Si se trata de un tratamiento de ortodoncia de gran envergadura y difícil para reparar algunos dientes, además de un traumatismo de gran envergadura o una extracción dental compleja, se puede optar por acudir al hospital. La ventaja de consultar a un médico en una clínica es que no es necesario hacer cola, se adopta un sistema de citas y se puede recibir tratamiento oportuno.
Si se trata de un problema menor, como dolor de muelas, se requieren empastes, tratamientos de conducto, reparaciones simples de coronas, limpieza dental, etc. , puedes acudir a una clínica dental para recibir tratamiento.
Introducción:
Antes del siglo XIX, los dentistas tenían mala reputación y las habilidades odontológicas no mejoraron hasta la aparición de las escuelas de odontología. En 1878, el gobierno británico aprobó una ley que garantizaba que los dentistas debían recibir una formación formal.
En 1872, Estados Unidos inventó el taladro dental para los dentistas modernos. El principio de los primeros taladros dentales era el mismo que el de las máquinas de coser. El dentista controla el pedal con el pie para hacer girar el taladro dental. Los taladros dentales más modernos funcionan con aire comprimido o agua y pueden girar 500.000 veces por minuto.