La leucemia todavía ocupa el primer lugar entre los cánceres infantiles. ¿Qué factores pueden inducir la leucemia?
La leucemia es un tumor maligno del sistema sanguíneo y una enfermedad clonal maligna de las células madre hematopoyéticas. Las células de leucemia clonal proliferan y se acumulan en la médula ósea y otros tejidos hematopoyéticos debido a una proliferación incontrolada, trastornos de diferenciación y apoptosis bloqueada, e infiltran otros tejidos y órganos no hematopoyéticos, al tiempo que inhiben la función hematopoyética normal. Los síntomas clínicos incluyen diversos grados de anemia, sangrado, fiebre, agrandamiento del hígado, del bazo, de los ganglios linfáticos y dolor de huesos.
Clínicamente, la causa de la mayoría de los pacientes con leucemia se desconoce, pero existen muchos factores predisponentes. Además de los factores virales y genéticos, los factores ambientales no pueden ignorarse y son más fáciles de detectar. Los factores ambientales identificados hasta ahora incluyen la radiación ionizante y la contaminación química. Muchos informes dicen que el 90% de la leucemia en los niños es causada por la contaminación causada por la decoración de casas nuevas. Los gases nocivos producidos por la construcción y decoración de casas nuevas son principalmente compuestos de formaldehído, benceno, tolueno, xileno y TVOC. Entre ellos, el formaldehído y el benceno pueden inducir leucemia.
El formaldehído es un gas tóxico, incoloro y de olor acre. Su principal peligro es la irritación de la piel y las mucosas. Cuando el formaldehído interior alcanza una cierta concentración, las personas se sentirán incómodas. Una pequeña cantidad de formaldehído puede provocar enfermedades respiratorias crónicas, trastornos menstruales femeninos, síndrome del embarazo, disminución de la aptitud física de los recién nacidos, anomalías cromosómicas e incluso cáncer de nasofaringe. Las altas concentraciones de formaldehído son tóxicas para el sistema nervioso, el sistema inmunológico y el hígado. Por tanto, el formaldehído puede provocar deformidades e incluso cáncer en los niños, y también puede provocar leucemia.
El benceno es el hidrocarburo aromático más simple. Tiene un sabor dulce a temperatura ambiente, es un líquido incoloro y transparente, es inflamable y cancerígeno y tiene un fuerte olor aromático. Un informe de investigación muestra que el período de incubación del benceno en el cuerpo es de 3 a 7 años. La exposición prolongada al benceno puede causar grandes daños a la sangre y provocar síndrome neurasténico. El benceno daña la médula ósea, reduce la cantidad de glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas y distorsiona los cromosomas, lo que provoca leucemia y, a su vez, anemia aplásica. El benceno puede provocar sangrado abundante y suprimir la función del sistema inmunológico. Se puede observar que el benceno también es el principal culpable de inducir leucemia.
Los expertos sugieren que si hay niños en casa, lo mejor es mudarse a una nueva casa a los seis meses para no afectar la salud de los niños. Vale la pena señalar que el período de incubación del formaldehído puede alcanzar de 3 a 15 años, por lo que también debe prestar atención a la apertura de ventanas para ventilación y a las plantas verdes de interior.