Estudia tú mismo usando la esquina de tu escritorio
1. Coloque las manos sobre la mesa para sostener su cuerpo. La distancia entre las manos es ligeramente más ancha que los hombros y las piernas están extendidas hacia la parte posterior del cuerpo. Mantenga la cabeza, el cuello, la espalda, las caderas y las piernas en línea recta, de modo que todo el cuerpo forme un ángulo de 45 grados con el suelo.
2. Exhala, dobla los codos e inclina lentamente la parte superior del cuerpo hacia abajo, manteniendo la parte superior del cuerpo recta. Exhala y repite esta acción 30 veces.
La esquina de una mesa suele ser la esquina afilada entre la superficie plana de la mesa y las patas de la mesa. Pueden causar rayones o daños por impacto en la piel humana, así que tenga cuidado. Puedes comprar algunos protectores de esquinas especialmente diseñados e instalarlos en las esquinas de la mesa para reducir los daños durante el impacto.
Asegúrate de que no haya bordes deshilachados, rotos o afilados en las esquinas de la mesa. Si encuentra problemas, repárelos o reemplácelos de inmediato. Trate de evitar el contacto directo con las esquinas de la mesa, especialmente si hay espacio limitado para moverse o desplazarse. Mantener la distancia reduce el riesgo de lesiones.
Tenga cuidado al mover la mesa para evitar golpear esquinas u otras partes afiladas de la mesa. Lo mejor es mover la mesa entre dos personas para garantizar la estabilidad y la seguridad. Si no se pueden utilizar protectores de esquinas, considere envolverlos con materiales suaves (como esponjas, tapetes o cinta adhesiva) para reducir el daño causado por el impacto.
En definitiva, presta especial atención a las esquinas de la mesa cuando la utilices para evitar daños innecesarios. Si le preocupan posibles lesiones causadas por las esquinas de la mesa, considere seguir los pasos anteriores para mantenerse a salvo.