Las causas y daños del bruxismo

Rechinar los dientes es una enfermedad, médicamente conocida como bruxismo, que es común en bebés y niños en edad preescolar. Según el Journal of the American Dental Association, aproximadamente los niños de 38 años rechinan los dientes mientras duermen.

Factores genéticos

El bruxismo es una herencia autosómica dominante. Si uno de los padres tiene un molar, el bebé también puede heredar ese molar.

Período dental

El período de erupción de los dientes temporales y los dientes permanentes son los dos períodos pico de problemas de rechinamiento de los dientes. En esta etapa, el bebé sentirá dolor y picazón y rechinará los dientes de forma inconsciente.

Posición para dormir

Los bebés mayores de 40 años que rechinan los dientes por la noche están acostumbrados a una posición fija para dormir. Cuando el bebé está acostado de lado o boca abajo, la mandíbula se desvía debido al apretón de la cabeza, provocando una alta tensión en la articulación temporomandibular y los músculos circundantes.

Dieta y Digestión

Comer demasiado antes de acostarse o ingerir alimentos no digeribles aumentará la carga sobre el tracto gastrointestinal, provocando un sueño inquieto y rechinamiento de dientes.

Daños

Si rechinas los dientes con demasiada frecuencia, el esmalte en el exterior de los dientes puede volverse cada vez más delgado, exponiendo la dentina sensible e incluso la pulpa, causando dolor de muelas. Los movimientos de masticación prolongados pueden provocar fácilmente dolor en los músculos masticatorios y afectación de la articulación temporomandibular, afectando así al sistema masticatorio.

Prevención

Ajusta la posición para dormir que fácilmente puede provocar que tu bebé rechine los dientes. Presta atención a cenar antes de acostarte, que debe ser con moderación y fácil de digerir. Asegúrese de que la dieta de su hijo contenga suficiente agua. La deshidratación puede estar relacionada con rechinar los dientes. Aprender a regular el estrés de los niños, como la inseguridad provocada por una compañía insuficiente, la ansiedad por separación, la presión académica, etc. Si se acompaña de otras manifestaciones patológicas, se recomienda consultar a un médico para que lo examine.