¿Pueden los probióticos tratar el cáncer?

¿Qué papel pueden desempeñar los probióticos en la prevención y el tratamiento del cáncer? Primero, veamos la formación o las fuentes de carcinógenos. 1.000.000.000.000 de bacterias intestinales constituyen una pequeña fábrica química en la que las bacterias dañinas descomponen los alimentos digeridos y otras sustancias del cuerpo en muchos carcinógenos, siendo los más comunes nitrosaminas, indoles, fenoles y ácidos biliares secundarios. También comemos alimentos que contienen algunos procancerígenos y cancerígenos (principalmente sal, ahumados, asados, fritos). ¿Cómo lidiar con los probióticos? En primer lugar, los probióticos actúan uniéndose, bloqueando o eliminando carcinógenos y lesiones precancerosas. También inhibe la actividad de bacterias e invertasas que pueden convertir procarcinógenos en carcinógenos. En pocas palabras, los probióticos pueden adsorber carcinógenos y procesarlos o transferirlos para debilitar su toxicidad. Los probióticos ayudan a mantener las bacterias dañinas y las enzimas dañinas alejadas del cuerpo, para que no tengan la posibilidad de procesar carcinógenos. El ejemplo más típico es que los probióticos pueden reducir la actividad de las enzimas fecales y prevenir eficazmente el cáncer de colon. En segundo lugar, los probióticos pueden acidificar los intestinos y regular la flora intestinal, reduciendo así la cantidad de bacterias dañinas y cambiando la solubilidad de la bilis. Reduce la conversión de la bilis en ácidos biliares secundarios cancerígenos. En tercer lugar, los probióticos pueden promover la peristalsis intestinal y acelerar la excreción de carcinógenos dañinos en las heces.

En cuanto al segundo punto clave, los probióticos también tienen cierto efecto sobre las células anormales. Primero, los probióticos pueden activar el sistema inmunológico y mejorar la respuesta inmune. Una vez que aparecen células anormales en el cuerpo humano, el sistema inmunológico las detectará rápidamente y luego generará una respuesta inmune. El factor de necrosis tumoral, la interleucina y el interferón producidos por las células inmunitarias son armas contra los tumores. En segundo lugar, los probióticos pueden producir compuestos que inhiben el crecimiento de células cancerosas. Por ejemplo, algunos glicopéptidos funcionales. En tercer lugar, los probióticos pueden producir sustancias antimutagénicas, bloquear el ataque de células dañinas, inhibir la transformación de células anormales y desempeñar un papel en la prevención del cáncer.

De hecho, muchos de los mecanismos por los que los probióticos previenen y tratan los tumores no están muy claros y aún están en proceso de mayor investigación. En 2007, el American Journal of Clinical Nutrition informó la conclusión experimental clínica de Ian Rowland, profesor de nutrición humana en la Universidad de Irlanda del Norte: las bebidas que contienen probióticos pueden reducir la posibilidad de daño genético a las células intestinales y ayudar a prevenirlo y tratarlo. cáncer. Otros estudios también han demostrado que los probióticos pueden reducir el riesgo de cáncer de vejiga. Dado que los probióticos tienen una conexión directa con el tracto digestivo, existe una clara correlación con el cáncer gastrointestinal.