Después de casarte, ¿cómo superas el disgusto que sientes por tu suegra después de dar a luz?
En segundo lugar, los hábitos de vida de las personas son diferentes. Quizás tu suegra tenga algunas formas de hacer las cosas con las que no estás de acuerdo. Tienes que entender que ella simplemente está cediendo a su manera. En definitiva, sería bueno ponerse en su lugar y aprender más sobre ellos. Piensa en el hecho de que el hijo que ella crió es el que elegiste en tu vida, el hombre con el que estás dispuesta a tener hijos, el hombre que odias a tu suegra y no quieres dejar. Pruebe una perspectiva diferente. Si la odias tanto, ¿por qué quieres estar con su hijo para siempre? Ya que quieres estar con su hijo para siempre, deja a un lado tu odio, porque esta es tu propia elección. Hay muchos factores necesarios para un matrimonio feliz.
Uno de ellos es que marido y mujer deben respetar y amar a sus padres y no deben regañar a los padres del otro por sus errores. ¡Esto es tabú! A menos que tu marido sea un lobo de ojos blancos y un hijo poco filial, tú también tienes mala suerte. ¡Una persona que no ama a sus padres ni siquiera tiene humanidad básica! Las parejas pueden expresar sus opiniones con tacto y prestar atención a la redacción. Si el entorno cambia para mejor, por el contrario, aprende a hacer la vista gorda. ¡Agua sin peces, pueblo sin discípulos! La suegra es madre y debería casarse cuando se case. Tal vez ella no se sienta mal porque no te apoya, no te comprende lo suficiente y ciertamente no te ama lo suficiente. Pero mi suegra quedó embarazada a los diez meses y trabajó duro para criar un marido que te ame, por eso es buena contigo. Una vez que comprendas esto, podrás dejar de lado algunos de tus prejuicios contra tu suegra.