¿Puedo comer lechuga durante el confinamiento?
La lechuga tiene las funciones de favorecer la lactancia, laxante y ayudar a la digestión. Las mujeres pueden comer lechuga durante el confinamiento, pero debe ser con moderación y no en exceso. La lechuga contiene un alto valor nutricional y tiene las funciones de digerir los alimentos, regular el qi y aliviar el dolor. Las mujeres que comen lechuga después del parto pueden estimular la secreción de enzimas digestivas en el cuerpo y aumentar el apetito.
La lechuga contiene una gran cantidad de celulosa vegetal, que puede favorecer la defecación, limpiar el tracto digestivo y la peristalsis intestinal, y es adecuada para tratar diversos estreñimientos. La lechuga contiene un líquido seroso de color blanco lechoso, que puede mejorar la secreción de bilis, jugos digestivos y jugos gástricos, y promover la función de los órganos digestivos del cuerpo.
La lechuga tiene un efecto diurético. Para las mujeres, la lechuga puede promover la secreción de leche y la micción. Tiene un cierto efecto terapéutico sobre enfermedades cardíacas, edemas, hipertensión y otras enfermedades. La lechuga contiene muchos minerales y vitaminas que son beneficiosos para el sistema nervioso del cuerpo, por lo que las mujeres pueden comer lechuga con moderación.