¿Se pueden beber juntas agua con miel y agua con limón?
El limón es una fruta con alto valor nutricional y medicinal. Tiene un fuerte efecto antioxidante y es muy eficaz para promover el metabolismo de la piel, retrasar el envejecimiento e inhibir la pigmentación. No solo eso, el limón también tiene los efectos de producir líquido, calmar la sed, armonizar el estómago, reducir las reacciones adversas, reducir la flema y aliviar la tos.
La miel es un nutriente natural que tiene las funciones de eliminar el calor, desintoxicar e hidratar. Si mezclas jugo de limón y miel con agua tibia para hacer limonada de miel, es una combinación nutricional perfecta. En las primeras etapas de un resfriado, beber agua con miel y limón también puede aliviar el dolor de garganta y aliviar molestias como la sequedad de garganta.
Existen dos formas de preparar agua con miel y limón, ambas sencillas.
El primer método: lava el limón, córtalo en rodajas en una taza, luego toma aproximadamente 2 cucharaditas de miel, vierte lentamente en agua tibia y revuelve uniformemente. Si te gusta beber hielo, agrega cubitos de hielo.
Segundo método: Remojar las rodajas de limón lavadas y cortadas en miel y guardarlas en el frigorífico para permitir que la miel y el limón se mezclen por completo. Cada mañana toma una rodaja de limón con una cuchara limpia y remójala directamente en agua. Es fácil seguir este método durante mucho tiempo, de lo contrario, a muchas personas les resultará problemático cortar un limón todos los días e insistir en no beberlo.
Efectos y precauciones: Beber cada mañana un vaso de agua de limón y miel en ayunas después de levantarse, que es a la vez bonito y limpiador del intestino, y luego desayunar. Para los usuarios de computadoras, beber esta agua con regularidad puede diluir las manchas faciales causadas por la radiación de la computadora. Vale la pena señalar que las personas con acidez estomacal excesiva y úlceras no deben beberlo.