Cómo conservar la jalea real
El peso específico de la jalea real fresca es ligeramente superior al del agua, pero inferior al de la miel, y es sensible al calor. Es fácil de fermentar a temperatura ambiente y falla entre 80 y 120 ℃. Es estable cuando se congela y puede almacenarse durante varios años por debajo de -18 ℃. La jalea real se oxida fácilmente en el aire y también puede hidrolizarse con vapor de agua. Por tanto, la jalea real debe almacenarse aislada del vapor de agua y del aire. Generalmente, se puede almacenar en el congelador (por debajo de 15 ℃) durante un mes, en el congelador (-10 ℃) durante un año y a -18 ℃ durante dos años. La jalea real es conocida como oro nutricional líquido. La temperatura, el aire y la luz solar tienen un gran impacto en la calidad de la jalea real. La jalea real fresca es muy sensible a la luz, el calor y el oxígeno. La luz puede reducir los grupos aldehído, ácido y cetona de la jalea real. Por lo tanto, la jalea real debe almacenarse a baja temperatura, protegida de la luz y sellada. El recipiente de almacenamiento debe ser neutro, insoluble y no debe contener plomo ni arsénico. Además, cuanto más fresca esté la jalea real, mejor será el efecto. La jalea real fresca pura que se vende actualmente en el mercado se conserva generalmente en cámaras frigoríficas o en frigoríficos a baja temperatura por debajo de -18°C. La oxidación biológica de la jalea real se detiene y puede conservarse durante varios años sin que se deteriore. La jalea real pura y fresca comprada por particulares se puede conservar en el congelador de un frigorífico doméstico durante aproximadamente un año. La jalea real fresca es una sustancia ácida, por lo que se debe almacenar en una botella de vidrio marrón o en una botella de plástico no tóxica, no en un recipiente de metal. En cuanto a la miel de jalea real, el líquido oral de jalea real y las tabletas de jalea real, generalmente se pueden almacenar en un lugar fresco.