¿Qué tan conmovedora es la escena en la que la policía de tránsito de Xi'an escolta a un bebé inconsciente al hospital a altas horas de la noche?
1. Una escena conmovedora durante la epidemia
Recientemente, ocurrió una escena conmovedora en Xi'an. En mitad de la noche, una madre pidió ayuda a la policía de guardia en la carretera, diciendo que su hijo de 5 meses tenía convulsiones y síntomas de coma y quería ir al hospital de inmediato. Quiero pedirle a la policía de tránsito que me ayude a despejar el camino. La policía de tránsito de turno rápidamente pidió a la madre y al hijo que subieran al auto. Continuaron preguntando sobre el estado del niño en la carretera. En menos de diez minutos, la policía envió a la madre y al hijo al hospital. Después de llegar al hospital, la policía no se fue inmediatamente, sino que siguió vigilándolos. También consolé a mi madre y le dije que si el niño tiene alguna afección, espere hasta que la policía confirme que el niño ha sido tratado antes de trasladarlo al hospital y regresar al trabajo. Cuando la epidemia es tan grave, la policía de tránsito aún puede proteger a la gente. Esta es también una escena muy conmovedora en Xi'an.
En segundo lugar, el niño está fuera de peligro.
Cuando la policía de tránsito envió al niño al hospital a tiempo, el niño recibió tratamiento oportuno. No hay grandes problemas por el momento. La madre del niño también se mostró muy agradecida a los agentes de policía de turno. Debido a la epidemia, la policía no ayudó a la madre. Creo que en el corazón de mi hijo también debería estar agradecido a los agentes de policía de servicio. En una noche de invierno tan fría, todavía hay un grupo de personas cuidándonos y echando una mano cuando necesitamos ayuda. Esto es muy reconfortante para muchas personas.
En tercer lugar, la ayuda mutua durante la epidemia
Este año, Xi'an se vio repentinamente envuelta por la epidemia, pero esto no disminuyó la confianza de Xi'an en derrotarla. Después del cierre de Xi'an, también recibió ayuda de todas partes y muchas personas se ofrecieron como voluntarias para unirse a la lucha contra la epidemia. Para combatir la epidemia, recuerdo una escena en la que un niño de pocos años fue solo al área de cuarentena porque le diagnosticaron la epidemia. También hizo mucho calor cuando se despidió del personal médico que lo envió al área de cuarentena. La epidemia es despiadada y cariñosa. Creo que con los esfuerzos conjuntos de la gente, esta epidemia saldrá victoriosa.