¿Se pueden operar las cataratas?
Se debe juzgar si los pacientes con cataratas pueden someterse a un tratamiento quirúrgico en función de sus propias circunstancias y de si existe alguna contraindicación para la cirugía. Si el estado de salud es relativamente bueno y no hay contraindicaciones para la cirugía, generalmente se puede realizar la cirugía. Aquellos con contraindicaciones obvias para la cirugía no pueden someterse a ella.
La catarata es una enfermedad de discapacidad visual causada por la opacidad del cristalino. La aparición es relativamente lenta y los síntomas principales son una pérdida de visión progresiva e indolora. Si las cataratas del paciente son graves y el tratamiento farmacológico no es eficaz, provocando pérdida de visión y afectando la vida normal, tras el examen preoperatorio se comprueba que no existen otras enfermedades oculares graves, y si se cumplen las indicaciones quirúrgicas, el paciente puede ser tratado quirúrgicamente por un especialista, existen muchos tipos de cirugías, como extracción de cataratas intracapsulares, implantación de lentes intraoculares, etc., por lo que para la mayoría de los pacientes se puede adoptar un tratamiento quirúrgico. Sin embargo, debido a que algunos pacientes están relativamente débiles, o padecen otras enfermedades graves, además de que son mayores y tienen poca resistencia, habrá ciertas complicaciones después de la cirugía, como opacidad de la cápsula posterior o aumento de la presión intraocular, que también pueden provocar endoftalmitis, etc. En este momento, los pacientes pueden tener mayores complicaciones postoperatorias, especialmente para los pacientes con lesiones del fondo de ojo, lesiones corneales y glaucoma, el tratamiento quirúrgico simple puede no ser efectivo, por lo que en este caso. En este caso, no se recomienda que los pacientes con cataratas se sometan a cirugía.
Las cataratas son causadas principalmente por la genética, el envejecimiento, la alta miopía, etc. Los síntomas típicos incluyen visión borrosa o disminución de la visión, aumento de las secreciones oculares y dolor ocular. Se recomienda buscar tratamiento médico a tiempo. Mantenga los ojos limpios en horarios habituales, vaya al hospital para realizarse exámenes oculares periódicos y use gafas de sol cuando realice actividades al aire libre para reducir la exposición a los rayos ultravioleta.