¿Cómo secar la cáscara seca de mandarina en casa?

La cáscara de mandarina es un ingrediente familiar que todo el mundo puede utilizar como condimento y medicina. Algunas cáscaras de mandarina valiosas a largo plazo también son muy caras, decenas de miles o más por malicioso. Por supuesto, debe tener la edad suficiente. A muchos amigos también les gusta secar un poco de cáscara de mandarina en casa, pero no conocen la operación específica. Hoy les compartiré cómo hacer cáscara de mandarina.

La primera es la elección del naranja. Para obtener una excelente cáscara de mandarina, la elección de las naranjas es importante. Se debe elegir rodajas de naranja maduras con piel dorada y tersa sin dañarlas ni apretarlas. Luego lavar y secar las rodajas de naranja, agrandar un poco la cáscara y luego realizar las operaciones de "tres cocciones al vapor y tres secado al sol".

Primero seque la piel de naranja al sol. Debe estar completamente seca para que no se deforme al recogerla. Luego ponerlo en una olla a cocer al vapor, cocer al vapor en agua fría durante 15 minutos, cocinar a fuego lento durante otros 5 minutos, luego sacarlo y seguir secando. Repita la cocción al vapor y el secado tres veces para convertirla en cáscara de mandarina. En este momento hay un fuerte sabor a naranja. El siguiente paso es el almacenamiento.

La piel de mandarina debe conservarse en un lugar seco y ventilado. Lo mejor es que la cáscara de mandarina tenga su edad y conviene revisarla de vez en cuando. Si hay retorno de humedad, recuerda sacarlo a tiempo y ponerlo al sol para que siga secándose. La cáscara de mandarina almacenada durante más de 3 años tiene un buen valor. Después de 3 años de crianza, el aroma de la piel de mandarina se ha vuelto muy rico.

Cuanto más tiempo se almacene la piel de mandarina, mayor será su valor. La cáscara de mandarina almacenada durante más de 5 años ya tiene valor medicinal. Con el paso de los años la piel de mandarina se vuelve cada vez más preciada, que es el valor que le da el tiempo. Por eso, si quieres hacer tu propia cáscara de mandarina en casa, debes tener la suficiente paciencia y un mantenimiento a largo plazo es la clave del éxito.

Una vez preparada la piel de mandarina, para prevenir el moho, se suele sacar a secar dos veces al año. Si se almacena bien, es mejor conservarla unos años más. Descubrirá que la cáscara de mandarina se vuelve cada vez más fragante y el efecto medicinal es cada vez mejor. La cáscara de mandarina cocida y el kimchi son buenas opciones. Si se almacena durante 3 años, la casa se llenará de fragancia.