Si tengo teratoma de ovario, ¿las consecuencias serán graves si no me hago la cirugía?
Hoy hablaremos de la gravedad de las consecuencias si no te operas del teratoma de ovario.
Los teratomas de ovario se pueden dividir en benignos y malignos. Se recomienda someterse a una cirugía lo antes posible, y esta cirugía es mínimamente invasiva y causa poco daño al cuerpo. Si se trata de un teratoma maligno, tendrá un grave impacto en los ovarios. Esta decisión debe tomarse con cuidado.
Hablemos de ello en detalle.
¿Primero? La cirugía de teratoma puede ser una cirugía abierta tradicional o una cirugía laparoscópica. En la actualidad, la cirugía y la anestesia están muy maduras y los riesgos de la cirugía son relativamente pequeños. La respiración espontánea no se ve afectada después de la anestesia y el catéter urinario se retira 2-3 días después de la cirugía. Se recomienda acudir al departamento de ginecología de un hospital habitual para un diagnóstico más detallado. Generalmente, los teratomas de ovario son comunes en tumores ginecológicos y requieren tratamiento quirúrgico después del diagnóstico. Utilice el diagnóstico patológico posoperatorio como estándar de oro y realice ejercicio al aire libre para aumentar la resistencia. Manténgase caliente.
¿Segundo? Una vez diagnosticado un teratoma, se debe realizar una cirugía si el tumor supera los 2 cm. La cirugía laparoscópica se puede elegir inmediatamente después del aborto espontáneo (la cirugía tradicional es muy invasiva y requiere recuperación física). Nuestro hospital utiliza principalmente la laparoscopia para extirpar teratomas. No se requiere cirugía, sólo se abren tres pequeños orificios (0,3-0,5 cm) en el abdomen y el médico puede realizar la cirugía mirando el monitor de la computadora y utilizando instrumentos laparoscópicos especiales. Los tumores generalmente benignos pueden preservar los ovarios.
¿Tercero? El teratoma puede afectar el embarazo, por lo que requiere tratamiento quirúrgico. El tratamiento intervencionista mínimamente invasivo no requiere cirugía y la operación se puede completar con solo una herida del tamaño de un grano de arroz. Consiste en inyectar un agente embólico en el tumor para bloquear el suministro de sangre al tumor, logrando así el propósito de matar de hambre al tumor. El tratamiento intervencionista mínimamente invasivo es la mejor opción para las pacientes femeninas. Causa menos daño al paciente, permite una recuperación rápida después de la cirugía y no daña los tejidos ni órganos normales.
Resumen
La salud de la mujer es una prioridad absoluta, no la dejes al azar.