¿Cómo distinguir entre enfermedad mental y enfermedad mental?
Para problemas como estos, la mayoría de las personas tienden a resolverlos ellos mismos o pedir ayuda a sus padres, familiares, profesores, etc. Si estos métodos de ajuste aún no funcionan, es necesario consultar a un psicólogo para que le ayude.
Además, el asesoramiento psicológico también es adecuado para las neurosis, incluidos el trastorno obsesivo-compulsivo, el trastorno de ansiedad, las fobias, la hipocondriasis, la neurastenia, los problemas de personalidad, etc. También es adecuado para trastornos psicológicos y fisiológicos (es decir, enfermedades psicosomáticas), trastornos psicológicos causados por enfermedades orgánicas del sistema nervioso, trastornos emocionales de los niños, problemas de aprendizaje, diversas anomalías del desarrollo mental, etc.
La enfermedad mental se refiere a trastornos en las actividades funcionales del cerebro, que resultan en diversos grados de actividades mentales como la cognición, la emoción, el comportamiento y la voluntad. Hay muchos factores causales: herencia congénita, características de personalidad y factores físicos, factores orgánicos, factores ambientales sociales, etc.
Muchos pacientes mentales sufren delirios, alucinaciones, delirios, trastornos del estado de ánimo, estupefacción, hablar solos, comportamientos extraños y disminución de la voluntad. La mayoría de los pacientes carecen de conciencia de sí mismos, no admiten su enfermedad y no buscan activamente la ayuda de los médicos.
Las enfermedades mentales comunes incluyen: esquizofrenia, psicosis maníaco-depresiva, psicosis menopáusica, psicosis paranoide y psicosis asociadas a diversas enfermedades orgánicas. Los pacientes y sus familias deben cooperar activamente con el psiquiatra y acudir al hospital para recibir tratamiento lo antes posible.
También hay mucha gente que siempre habla de los demás en tono burlón: ¿Estás loco? .
De hecho, la neuropatía se refiere a lesiones orgánicas del sistema nervioso central y de los nervios periféricos. A menudo se presentan síntomas como dolor evidente, entumecimiento, pérdida sensorial, parálisis, etc. y/o signos de localización del sistema nervioso. Los instrumentos médicos como la tomografía computarizada y la resonancia magnética pueden encontrar la ubicación de la lesión.
Las enfermedades neurológicas comunes incluyen encefalitis, meningitis, cisticercosis cerebral, hemorragia cerebral, infarto cerebral, epilepsia, tumores cerebrales, miastenia gravis, etc.