Tengo calambres durante el ejercicio ¿Qué trucos puedo utilizar para combatir los calambres?
Primero debemos saber ¿qué son los calambres? Calambre es sólo un término popular, el nombre científico debería ser espasmo muscular. Además de los calambres causados por enfermedades, existen muchas causas de calambres en nuestra vida diaria, la más común de las cuales es el espasmo de los músculos de las piernas. Entonces, ¿cómo debería solucionarse esta situación?
En primer lugar, la forma más sencilla y directa es estirar los músculos, que es lo que venimos diciendo. Ya sea un estiramiento dinámico antes del ejercicio o un estiramiento estático después del ejercicio, es una buena forma de estirar los músculos. Especialmente para quienes hacen ejercicio con regularidad, es fácil provocar calambres causados por la fatiga muscular después de un ejercicio prolongado, por lo que estirar los músculos es particularmente importante.
No solo eso, a veces la diferencia de temperatura entre el interior y el exterior es grande, y la estimulación repentina del frío también puede provocar espasmos musculares. Por lo tanto, no debemos coger una toalla fría para secarnos el sudor y bañarnos con agua fría inmediatamente después del ejercicio, ni tampoco debemos encender el aire acondicionado o el ventilador inmediatamente después del ejercicio en un día caluroso. El estiramiento estático después del ejercicio no solo relaja los músculos, sino que también permite que la temperatura corporal baje y se estabilice lentamente.
En segundo lugar, si llevamos mucho tiempo sin hacer ejercicio y de repente empezamos a hacer ejercicio con el fin de perder peso o ganar músculo, no hacer ejercicio de repente con alta intensidad, sino aumentar lentamente la cantidad de ejercicio. La mejor opción es aumentar tu actividad física aproximadamente un 10% cada semana. Dado que la mejor opción para la fatiga es descansar, es muy importante dormir lo suficiente, de lo contrario fácilmente se producirá la acumulación de metabolitos ácidos y calambres.
En cuanto al aporte nutricional, el agua perdida en el organismo debe reponerse a tiempo, pero no en exceso. El agua diluye los iones de sodio en la sangre y provoca calambres. No sólo eso, también necesitamos añadir más calcio. La leche es una buena opción y también aporta proteínas.
Si tienes calambres, nuestro método más directo y sencillo es masajear y estirar la zona acalambrada, lo que hacen muchos jugadores de fútbol después de los calambres. Por ejemplo, podemos masajear el músculo gastrocnemio de la pantorrilla y estirarlo. Por supuesto, habrá dolor durante unos días después de los calambres, que son causados por el daño a las fibras musculares durante la tracción. Podemos seguir masajeando la zona acalambrada y, si es posible, aplicar algún medicamento traumatológico como el aceite de cártamo.
En definitiva, los calambres son algo muy doloroso, pero también ponen de relieve la importancia de conocimientos relacionados con el ejercicio como los estiramientos y la nutrición. En resumen, beba más agua pero no demasiada, preste atención a los suplementos dietéticos de calcio, estírese más y preste atención al ejercicio y la fatiga física.