Red de conocimientos sobre prescripción popular - Masaje de pies y cuidados de la salud - Qingpibai Tangya: calma el hígado y regula el qi, elimina la acumulación y resuelve el estancamiento.

Qingpibai Tangya: calma el hígado y regula el qi, elimina la acumulación y resuelve el estancamiento.

Ingredientes: 5 gramos de piel verde, 5 gramos de piel de mandarina, 9 gramos de cúrcuma, 9 gramos de Cyperus cyperus, 9 gramos de raíz de peonía blanca, 500 gramos de carne de pato blanco, 5 gramos de jengibre, 5 gramos de cebolla verde, y 5 gramos de sal.

Método: Poner la cáscara verde, la cáscara de mandarina, la cúrcuma y la raíz de peonía blanca en una bolsa de gasa y atar bien la boca.

Pinchamos el jengibre sin apretar y cortamos la cebolla en gajos.

Lavar el pato blanco, cortarlo en trozos cuadrados de 4 cm, ponerlo en una cazuela, añadir 800 ml de agua, añadir la bolsita de medicina, el jengibre y la cebolleta.

Lleve la olla a ebullición a fuego alto y luego cocine a fuego lento durante 50 minutos.

Tomarlo dos veces al día, comer 50 gramos de carne de pato y beber 200 ml de sopa cada vez.

Su naturaleza y sabor son cálidos, amargos y picantes, y regresa a los meridianos del hígado, la vesícula biliar y el estómago.

Las personas con deficiencia de Qi deben evitar tomar esta combinación.

Yangshengtang sugiere que esta sopa puede calmar el hígado y regular el qi, eliminar la acumulación e inducir el estancamiento. Se utiliza en pacientes con hepatitis viral aguda cuyos síntomas incluyen depresión hepática y estancamiento del qi, dolor hipocondríaco y opresión en el pecho. También es adecuado para pecho y costillas, distensión abdominal, mastitis, dolor de hernia, acumulación de alimentos y otros síntomas.

Consejos de salud para pacientes con ictericia y hepatitis: Cuando la humedad invade el cuerpo humano, el bazo y el estómago son los más afectados. La atención de enfermería a los pacientes con hepatitis ictérica se centra en la regulación del bazo y el estómago, que desempeñan un importante papel terapéutico auxiliar. Para pacientes con ictericia y hepatitis en general, tenemos las siguientes recomendaciones:

Calor. ¿Cuál debe ser la ingesta calórica diaria de los adultos? Con un peso corporal objetivo de 35 kcal/kg, las calorías para un adulto de 70 kg son 2100-2450 kcal. El uso de una dieta alta en calorías puede conducir fácilmente a la obesidad y los lípidos depositados se acumulan en el hígado para formar hígado graso, por lo que no es adecuado utilizar una dieta alta en calorías.

Proteína. Los pacientes con hepatitis son propensos a sufrir síntomas como náuseas, vómitos, pérdida de apetito y cambios en el gusto, lo que puede reducir la ingesta de alimentos y proteínas y provocar fácilmente una deficiencia de proteínas. En este momento, si se presta atención a la cantidad de proteína, puede ayudar al hígado a reparar el tejido dañado. Por lo tanto, se recomienda que la cantidad diaria de proteína alcance 1-1,5 g/kg de peso corporal, 2/3 de la cual debería ser. Provienen de alimentos proteicos con mayor biomasa, como carne, huevos de pescado, leche, etc. Los alimentos de origen vegetal, como los frijoles, contienen proteínas pero no contienen todos los "aminoácidos esenciales" que requiere el cuerpo humano y no se absorben ni utilizan tan eficientemente como las proteínas de origen animal.

Azúcar. Si hay suficiente azúcar en la dieta como fuente de calor, se puede reducir la posibilidad de que las proteínas de la dieta actúen como fuente de calor, de modo que estas proteínas puedan usarse como materia prima para la reparación del tejido hepático. ¿Debería comer 300 al día? 400 gramos, unos 5 tazones de arroz. No debe ser demasiado para no afectar el funcionamiento normal de las células del hígado.

Lípidos. Una vez que la función hepática vuelve a la normalidad, la ingesta de grasas no debe exceder los 100 g. Por lo tanto, no es necesario restringir excesivamente las grasas, porque la restricción de grasas hará que los alimentos sean insípidos y afectará la absorción de vitaminas liposolubles.

Vitaminas y minerales. Las fuentes de alimentos son las mejores. Un suministro adecuado ayuda al hígado a resistir el estrés y reparar el daño.

Come más. Las dietas concentradas líquidas y semilíquidas son más adecuadas para personas con hepatitis. Se deben evitar los alimentos fritos y se deben utilizar alimentos frescos y limpios al cocinar, especialmente los alimentos cocidos.