¿Cómo es un cactus?
El cactus es plano, con forma de gota de agua, ancho en la parte superior y estrecho en la parte inferior. El color es verde y verde oscuro. La superficie está cubierta de espinas. El olor es el mismo que el de la hierba, es relativamente ligero y tiene un sabor ligeramente amargo. El olor no es ni venenoso ni picante.
Las hojas del cactus son espinas que crecen en la epidermis. Sus colores son verdes y amarillos. Para adaptarse al clima seco y cálido, degenera las hojas en espinas. Su finalidad Prevenir la pérdida de agua. Las flores del cactus vienen en blanco, amarillo, rojo, naranja y otros colores. Sus flores florecen en la parte superior del cactus en forma radial. Su diámetro es de unos 5 cm. Los pétalos del cactus son ovalados.
Hábitos de crecimiento de los cactus
A los cactus les gusta la luz, les gusta crecer en un ambiente con mucha luz y tienen una gran tolerancia a la sequía. Le gusta un ambiente cálido, y la mejor temperatura es entre 20 y 30 grados. Debe haber una cierta diferencia de temperatura durante la temporada alta de crecimiento, para que la germinación pueda ser mejor. Al criarlo y manejarlo, tenga cuidado de no regarlo con demasiada frecuencia, solo riéguelo cuando esté completamente seco.
Es resistente a la esterilidad, por lo que no es necesario complementar el fertilizante con frecuencia, de lo contrario fácilmente causará daños al fertilizante. Además, preste atención al refugio y drenaje oportunos durante la temporada de lluvias para evitar encharcamientos. Al regar un cactus, asegúrese de seguir el principio de "no regarlo hasta secarlo, no mojarlo demasiado". A los cactus les gusta el sol y no temen la sequedad. Por ello, conviene regar una vez al mes en primavera y verano, y una vez cada 2 o 3 meses en invierno.