No se puede comer nada en la luna.

Tradicionalmente, las mujeres embarazadas beben sopa de pollo durante el parto para reponer el qi y la sangre y promover la lactancia. Sin embargo, la investigación médica moderna revela un punto diferente: las mujeres embarazadas no deben comer gallinas viejas durante el segundo trimestre. Entonces, ¿cómo deberían elegir las mujeres?

No apto para comer gallinas viejas.

Las gallinas viejas contienen estrógenos, que pueden inhibir la secreción de prolactina y afectar la producción de leche materna. Al mismo tiempo, las gallinas viejas también son productos para el cabello, que son grasosos y aceitosos, lo que puede hacer que la madre sea más obesa. Comer gallinas viejas demasiado pronto puede dificultar la recuperación gastrointestinal y afectar la absorción de nutrientes.

Mejor elección: gallo

Los gallos son ricos en andrógenos, que ayudan a favorecer la secreción de leche materna. Los gallos tienen un contenido de grasa relativamente bajo y no contribuyen a la obesidad materna. Además, el gallo también es rico en nutrientes como el colágeno, que tiene el efecto de nutrir la sangre y reponer el qi, tratar las manos y los pies fríos y la anemia. Estos nutrientes también ayudan a reparar el tejido hepático y mejorar la inmunidad del cuerpo.

Elige un gallo como ingrediente.

Si una madre quiere complementar su nutrición durante el parto, también podría elegir el gallo como ingrediente, que no sólo puede satisfacer sus necesidades gustativas, sino también promover la recuperación del cuerpo.