A principios de la primavera en marzo, vaya a Jiangsu para experimentar un viaje saludable a las aguas termales. ¿Cuáles son los beneficios de sumergirse en aguas termales para el cuerpo humano?
Varios beneficios de sumergirse en aguas termales:
1. En invierno, el clima es frío. Remojarse en aguas termales puede abrir rápidamente los poros de la piel en un corto período de tiempo, lo que ayuda al cuerpo a absorber los elementos minerales de las aguas termales que pueden mejorar la condición de la piel y hacer que esté más hidratada. Los productos químicos de las aguas termales pueden embellecer tu piel. Por ejemplo, los manantiales de azufre pueden suavizar las cutículas y los manantiales carbonatados que contienen sodio pueden blanquear la piel.
En segundo lugar, desintoxicarse y perder peso. Al sumergirse en aguas termales, los poros de la piel humana se abren y las toxinas del cuerpo pueden excretarse a través de los poros con el sudor. No solo puede mejorar la condición física y la inmunidad, sino que también desempeña un cierto papel en la pérdida de peso.
En tercer lugar, aliviar la fatiga. Sumergirse en aguas termales puede relajar el cuerpo y la mente. Las personas sentirán fatiga muscular después de un ejercicio extenuante. Remojarse en aguas termales puede eliminar la fatiga y aliviar el dolor muscular. Esto se debe a que la presión del agua y el calor pueden descargar fácilmente el ácido láctico (una sustancia que causa fatiga) del cuerpo humano.
En cuarto lugar, relajar los músculos y favorecer la circulación sanguínea. En invierno, el clima se vuelve más frío y las actividades de la gente disminuyen. Si permanece sentado durante mucho tiempo en el trabajo, es propenso a sufrir síntomas como estasis sanguínea y meridianos bloqueados. Remojarse en aguas termales puede promover la circulación sanguínea y acelerar el metabolismo.
A la hora de sumergirte en aguas termales, debido a las diferentes composiciones minerales de las aguas termales, debes elegir la fuente termal que más te convenga según la situación real. Por ejemplo, las aguas termales se pueden dividir en manantiales de carbonato neutro, manantiales de bicarbonato de sodio alcalino, manantiales de sal y manantiales de azufre según la calidad del agua.
El manantial carbonatado tiene ciertos efectos en la prevención de enfermedades cardíacas, hipertensión arterial y arteriosclerosis. Los manantiales de azufre tienen un efecto calmante en las enfermedades crónicas de la piel.