¿Se pueden curar los tumores malignos de ovario?
Los quistes ováricos se pueden dividir en quistes foliculares y quistes del cuerpo lúteo. Las razones exactas no están del todo claras. Actualmente se cree que los quistes ováricos pueden estar relacionados con disfunción endocrina, secreción insuficiente de hormona luteinizante y alteración de la función de ovulación.
El quiste de ovario es un tipo de tumor de ovario en un sentido amplio que puede presentarse en todas las edades, pero es más común en aquellas entre 20 y 50 años. La malignidad de ovario es difícil de diagnosticar en una etapa temprana porque ocurre en raras ocasiones. Cuando se diagnostican, el 70% de los tumores malignos de ovario se encuentran en etapas avanzadas y rara vez se tratan en una etapa temprana. La tasa de supervivencia a 5 años siempre ha oscilado entre 20 y 30, lo que lo convierte en uno de los tumores malignos más graves que amenazan la vida de las mujeres. El ovario es un órgano pequeño del cuerpo humano, pero es un sitio común para muchos tumores. Los tumores de ovario pueden ser de diferente naturaleza y forma: únicos o mixtos, unilaterales o bilaterales y bilaterales.
Quiste ovárico
Un quiste ovárico es un saco de líquido sobre o cerca del ovario. Este saco lleno de líquido puede crecer bastante y, en casos raros, interferir con la capacidad de los ovarios para producir hormonas sexuales. En algunos casos, los óvulos se desarrollan de forma anormal en los ovarios, formando pequeños quistes. Este quiste no suele causar síntomas y desaparece en un mes.
¿Cuáles son los síntomas?
Los quistes ováricos generalmente no presentan síntomas, pero es posible que notes un bulto firme e indoloro en la parte inferior del abdomen o dolor durante las relaciones sexuales. Los quistes grandes pueden causar presión cerca de la vejiga, provocando retención urinaria, pero esto rara vez ocurre. Cuando los quistes interfieren con la producción de hormonas, pueden aparecer síntomas como sangrado vaginal irregular o aumento del vello corporal (ver "Anomalías hipotalámicas, pituitarias y ováricas"). El quiste puede torcerse y causar dolor abdominal intenso, náuseas y fiebre.
¿Cuáles son los peligros?
Los quistes ováricos son comunes pero rara vez requieren tratamiento. Los quistes que no causan problemas generalmente se descubren durante un examen físico de rutina. El mayor peligro de los quistes ováricos es que pueden torcerse o ulcerarse, provocando peritonitis, o pueden no ser quistes ováricos, sino tumores malignos.
¿Qué se debe hacer?
Si presentas alguno de los síntomas anteriores debes acudir al médico. Si su médico encuentra una masa en su ovario, es posible que necesite más pruebas. Estas pruebas incluyen laparoscopia o una mirada a través de un tubo en el abdomen.
¿Qué opinas?
Los quistes ováricos no malignos a veces se pueden tratar con drenaje quirúrgico laparoscópico, pero el tratamiento habitual es la extirpación del quiste. Este tratamiento generalmente no afecta los ovarios, pero ocasionalmente se debe extirpar todo el ovario o incluso la trompa de Falopio para garantizar la eliminación de todo el quiste. Como tiene dos ovarios, aún puede tener hijos después de extirpar un ovario.
Si has tenido hijos o has pasado por la menopausia, tu ginecólogo te recomendará extirpar tanto los ovarios como el útero. Esto se debe a que una vez que se tiene cierto tipo de quiste, es posible que reaparezcan. Cuando un quiste reaparece, usted corre el riesgo de sufrir cáncer.
Materiales de referencia:
Red de Salud del Hospital de Shanghai de Aviación Civil