Principios del tratamiento del asma

El asma es una enfermedad crónica muy común que puede presentarse a cualquier edad, pero más de la mitad de los casos se desarrolla en la infancia si no se trata a tiempo, la enfermedad puede persistir durante toda la vida. La investigación sobre el asma ha logrado grandes avances en la última década y la mayoría de los pacientes pueden controlarse bien con un tratamiento regular.

La aparición del asma está relacionada mayoritariamente con factores alérgicos. Por ejemplo, los alérgenos de interior incluyen ácaros del polvo, cucarachas, moho, caspa de animales, humo (cigarrillos, vapores de cocina), etc., al aire libre hay varios polen, alérgenos en árboles, flores y plantas, incluidos la leche, el pescado y los camarones; , huevos, etc.; los medicamentos incluyen aspirina, indometacina, penicilina, etc. La mejor manera es evitar el contacto tanto como sea posible. Si esto no se puede evitar, se puede realizar inmunoterapia contra alérgenos específicos (terapia de desensibilización). En segundo lugar, se debe realizar un autocontrol de la afección. Vaya al hospital con regularidad para comprobar su función pulmonar. Detectar cambios en la condición tempranamente y brindar orientación sobre el ajuste de la medicación.

El tratamiento médico del asma se divide en tratamiento sintomático (antiasmático) durante los ataques agudos y tratamiento paso a paso para el manejo a largo plazo durante los ataques no agudos. En los ataques agudos se prefieren los agonistas β2 inhalados, como el albuterol y el aerosol de butirósido. 100 mg cada vez, generalmente no más de 600 a 800 mg al día. Si el efecto no es satisfactorio, se pueden agregar tabletas de agonistas β2 como holtrenina o teofilina de liberación sostenida. Para el asma con ataques nocturnos, se prefiere el agonista β2 de acción prolongada para inhalación, y también se puede usar teofilina de liberación sostenida. por vía oral, la dosis habitual es de 6 a 8 mg/kg de peso corporal/día, evite la sobredosis.

El tratamiento antiinflamatorio ha sido reconocido como la medicación de primera línea en los programas de tratamiento del asma a largo plazo. Los medicamentos de uso común incluyen hormonas inhaladas, como el aerosol de bicodona y el aerosol de budesonida. Fludecasona. Una vez controlada la afección, la dosis debe reducirse gradualmente. Generalmente, es necesario continuarla durante más de 1 año y el medicamento sólo puede suspenderse bajo la supervisión de un médico. Otros fármacos antiinflamatorios y antialérgicos que se pueden utilizar incluyen cromoglicato de sodio, nidolato de sodio y antagonistas de leucotrienos. En general, se cree que debe usarse en combinación con hormonas inhaladas.

Aunque el asma aún no se puede curar, la mayoría de los pacientes pueden controlarla al mismo nivel que las personas normales. Por lo tanto, los pacientes deben generar confianza, eliminar preocupaciones y seguir un tratamiento integral a largo plazo para lograr buenos resultados.