¿Cuáles son los beneficios de beber cerámica por la noche?
Prevención y tratamiento de enfermedades cardiovasculares
Beber vino de forma adecuada puede aumentar la concentración de lipoproteínas de alta densidad. En la sangre, la lipoproteína de alta densidad puede transportar el colesterol en la sangre al hígado, donde puede depositarse en la íntima de los vasos sanguíneos, previniendo así la arteriosclerosis. Además, una vez que los polifenoles del vino ingresan al sistema digestivo humano, acelerarán la conversión del colesterol en la sangre, es decir, reducirán el contenido de colesterol de baja densidad. Porque el vino tinto tiene el mayor contenido de polifenoles. Por tanto, beber vino tinto con moderación puede prevenir y tratar diversas enfermedades cardiovasculares y disminuir la presión arterial.
Prevenir la formación de células cancerosas
El vino es rico en resveratrol, que no sólo evita que las células se vuelvan cancerosas, sino que también previene la propagación de tumores malignos. Beber con moderación puede reducir la incidencia de muchos cánceres, como el cáncer de mama, el cáncer de próstata, el cáncer de laringe, el cáncer de pulmón, etc.
Efecto antienvejecimiento
Los polifenoles como las antocianinas y los taninos del vino, especialmente del vino tinto seco, tienen el efecto de eliminar las especies reactivas de oxígeno. Según las pruebas, la capacidad antioxidante del vino tinto en la sangre humana comienza a aumentar después de beber vino tinto, alcanzando un máximo después de 90 minutos, con un aumento promedio de 15.
El efecto apetitoso y fortalecedor del bazo
Debido a que el vino se fermenta a partir de jugo de uva puro, todas las sustancias ácidas naturales del jugo de uva se disuelven en el vino, por lo que su acidez es cercano al ácido gástrico (pH) 2~2,5). Por tanto, el vino es un buen condimento que puede ayudar a la digestión y absorción de proteínas.
Efecto calmante nervioso
En comparación con la mayoría de los alimentos, el vino puede ser absorbido por el cuerpo sin predigestión. Dentro de un rango de consumo razonable, el vino puede afectar directamente al sistema nervioso periférico, mejorando así el tono muscular. El vino también puede actuar sobre el centro neuromotor, aportando a las personas una sensación confortable y placentera. Este estado de equilibrio mental hace que nuestro pensamiento sea más ágil, nuestro juicio más preciso y nuestro espíritu más alegre. Por tanto, para las personas que padecen neurosis por ansiedad, beber una pequeña cantidad de alcohol no sólo puede calmar la ansiedad, sino también evitar la toma de sedantes con efectos secundarios.
Beber es como comer ginseng.
Como bebida de alta gama, se puede decir que el vino tinto es una buena bebida en la mesa, pero a la hora de beberlo hay que prestar atención a los siguientes tabúes:
★ Tabúes sobre los mariscos.
En general, maridar vino tinto con carnes rojas está de acuerdo con las reglas de cocina, porque los taninos del vino tinto y las proteínas de la carne roja se combinan para hacer que la digestión sea "más suave". Sin embargo, si mezclas vino tinto con algunos mariscos (como cangrejos, camarones, etc.). ), puede causar estragos en el sabor de los mariscos, y el propio vino puede incluso impartir un desagradable sabor metálico.
★ "Beber" con vinagre
La ensalada normalmente no afecta el estilo del vino, pero si se mezcla vinagre con la ensalada y se come con vino tinto, el sabor será mucho mayor. reducido. En este momento, también puedes optar por la limonada, porque el ácido cítrico que contiene puede armonizar muy bien con el carácter del vino.
Además, el queso y el vino son una combinación naturalmente ideal, sólo hay que tener cuidado de no combinar queso picante con vino refinado.
★Tres tabúes sobre beber "mar"
Los expertos creen que la cantidad de vino tinto que se bebe debe ser de 50 a 100 ml cada vez, pero no más de 250 ml por día. El profesor británico Doyle señaló que la tasa de mortalidad de las personas que beben moderadamente es un 28% menor que la de las personas que no beben en absoluto, pero si se supera este límite, la tasa de mortalidad no disminuirá sino que aumentará. El consumo excesivo de alcohol no sólo es una causa importante de enfermedades como el cáncer de hígado y la cirrosis, sino que también causa un sinfín de problemas sociales.
Además, lo mejor es beber vino tinto con las comidas, lo que puede evitar que el estómago absorba etanol y reducir la concentración de etanol en sangre en un 50%.