¿Cómo pueden las mujeres embarazadas controlar razonablemente su dieta?
Durante el embarazo una dieta razonable es muy importante para la salud de la madre y del bebé. Las siguientes son algunas sugerencias:
1. Dieta equilibrada: Asegurar la ingesta de diversos nutrientes, entre ellos proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas y minerales. Consuma más frutas frescas, verduras, cereales integrales, productos lácteos bajos en grasa y carnes magras.
2. Controlar el peso: Según las circunstancias personales, controlar el aumento de peso de forma razonable. La obesidad o la emaciación pueden afectar negativamente la salud materna e infantil. Hable con su médico o nutricionista para establecer un objetivo de aumento de peso adecuado para usted.
3. Evite el ayuno: Coma siempre comidas pequeñas con frecuencia y evite periodos prolongados de ayuno. Esto ayuda a mantener la estabilidad del azúcar en sangre y reducir la aparición de reacciones del embarazo.
4. Evite comer carne cruda: Comer carne cruda puede contener bacterias o parásitos, aumentando el riesgo de infección. Asegúrese de que los alimentos estén completamente cocidos y evite el pescado crudo, los huevos o la carne sin procesar.
5. Suplementar ácido fólico: El ácido fólico es muy importante para el desarrollo del tubo neural fetal. Las mujeres embarazadas deben comenzar a tomar suplementos de ácido fólico antes y durante el embarazo y continuar tomándolos durante todo el embarazo.
6. Evite el consumo excesivo de cafeína: El consumo excesivo de cafeína puede aumentar el riesgo de aborto espontáneo y parto prematuro. Limite el consumo de café, té y chocolate.
7. Evitar fumar y el alcohol: El tabaco y el alcohol son perjudiciales para el desarrollo fetal. Se debe evitar por completo beber alcohol y fumar durante el embarazo.
8. Presta atención a la seguridad alimentaria: evita comer alimentos caducados y mantén la higiene y seguridad alimentaria. Preste atención a la higiene personal, como lavarse las manos con frecuencia.
Lo más importante es que la situación de cada mujer embarazada es única. Lo mejor es consultar a un médico o nutricionista profesional durante el embarazo para desarrollar un plan de dieta que se adapte a ti.