¿Cuál es la mejor forma de preparar leche en polvo para bebés?
La temperatura del agua demasiado alta puede quemar fácilmente la mucosa oral del bebé, mientras que el agua a temperatura demasiado baja puede irritar fácilmente el tracto gastrointestinal del bebé, provocando indigestión, dolor abdominal, diarrea y otros síntomas. El agua tibia de 40°C a 60°C no solo es útil para promover la disolución de la leche en polvo en líquido, sino que también garantiza que los nutrientes de la leche en polvo no se destruyan y asegura la nutrición de la leche en polvo.
Cabe señalar que la leche en polvo para bebés debe consumirse inmediatamente y no debe dejarse por mucho tiempo, debido a que la leche en polvo contiene una gran cantidad de proteínas y vitaminas, que pueden destruirse durante el almacenamiento, afectando la valor nutricional. Al preparar leche en polvo, agregue primero agua hirviendo y luego la leche en polvo. Cuando la mezcla esté uniformemente mezclada, se debe girar y agitar horizontalmente en lugar de arriba y abajo. Antes de amamantar, puede exprimir la leche de fórmula en el dorso de la mano para ver si la temperatura de la leche es la adecuada.
Precauciones para bebés que toman leche en polvo
1. No cocinar más la leche en polvo.
Algunos niños tienen poco apetito y es posible que no puedan terminar una taza de leche en polvo. En este caso, para evitar desperdicios, muchas madres reservan la leche en polvo y la cocinan antes de dársela a sus hijos. Sin embargo, si la leche en polvo preparada se vuelve a cocinar, en realidad cambiará la estructura de algunos nutrientes y perderá los nutrientes. Valor nutricional original.
2. No utilizar sopa para preparar leche en polvo.
Las nuevas madres pueden pensar que usar caldo para hacer leche en polvo hará que la leche en polvo sea más nutritiva, permitiendo que el niño absorba la leche en polvo y duplicando los nutrientes del caldo. Sin embargo, si bebe este tipo. De leche en polvo durante mucho tiempo, causará daño al cuerpo del niño. Algunos órganos y la sangre se verán muy afectados.
3. No sustituir directamente la leche en polvo.
Muchas madres cambiarán la leche en polvo para sus hijos por algunas razones durante el proceso de alimentación con leche en polvo a sus hijos. Sin embargo, al cambiar la leche en polvo a sus bebés, deben prestar atención a un período de transición. Durante este período de transición, podemos mezclar las dos leches en polvo para el niño y reducir gradualmente la proporción de la leche en polvo vieja de vez en cuando para permitir que el niño se adapte.
4. No alimente a su hijo con demasiada leche en polvo.
Muchas madres están preocupadas de que sus hijos no tengan suficiente para comer, por lo que les dan mucha leche en polvo, lo que en realidad ejerce cierta presión sobre el tracto gastrointestinal de sus hijos.