Cómo identificar el cáncer de pulmón
En segundo lugar, hay que distinguirla de la neumonía, y ésta debe distinguirse de la neumonía obstructiva cancerosa. Normalmente, la aparición de la neumonía es relativamente aguda, con síntomas de envenenamiento de la sangre, como escalofríos y fiebre alta, primero, y luego síntomas respiratorios. Los antibióticos se absorben rápidamente, pero si se produce una neumonía localizada persistente, se debe estar muy atento a la presencia de cáncer de pulmón.
El tercero son los tumores pulmonares benignos, como papilomas, adenomas o tumores mixtos.
Además, es necesario distinguir el cáncer de pulmón de las metástasis pulmonares, que pueden distinguirse mediante imágenes por tomografía computarizada.
En quinto lugar, se trata de un tumor mediastínico. Los tumores mediastínicos también deben diferenciarse del cáncer de pulmón, que puede detectarse mediante mediastinoscopia.
Además, algunos casos de pleuresía tuberculosa deben diferenciarse del derrame pleural canceroso.
No existe una conclusión unificada sobre la causa del cáncer de pulmón, pero generalmente incluye los siguientes aspectos: en primer lugar, el tabaquismo, incluido el humo de segunda mano; en segundo lugar, la contaminación del aire, la contaminación por humos de cocina y diversas radiaciones ionizantes; en tercer lugar, los hábitos alimentarios, como la dieta rica en grasas; en cuarto lugar, existen otras causas desconocidas, como la obesidad, el estrés laboral o vital y algunos factores genéticos. Estas razones actúan sobre las células normales y hacen que los genes de las células se vuelvan cancerosos, formando cáncer de pulmón. Generalmente se cree que fumar está estrechamente relacionado con el cáncer de pulmón, pero clínicamente se observa a menudo que los no fumadores también pueden desarrollar cáncer de pulmón. Los pacientes con cáncer de pulmón no son necesariamente fumadores, por lo que las causas del cáncer de pulmón son muy complejas.